

En Colombia, dónde una de cada tres familias habitan en viviendas arrendadas, son muy comunes las unidades residenciales. Estos complejos, también llamados propiedades horizontales, presentan normas propias y transgredirlas puede llevar a sanciones.
Aún así, algunos se aprovechan e imponen multas a través de procesos irregulares. Es por eso que la Ley de Propiedad Horizontal establece el marco para las sanciones en complejos residenciales.
Conocer la normativa permite evitar cargos extraordinarios a la hora de alquilar en uno de estos complejos. De la misma forma, inquilinos y propietarios siempre deben respetar las normas de convivencia.
Esta ley impide sanciones unilaterales en unidades residenciales
Según la Ley 675 de 2001, el administrador de una unidad residencial no tiene la facultad para imponer sanciones de forma unilateral. Cualquier acción disciplinaria que se realice de forma unánime podrá ser investigada y sancionada por considerarse una vulneración del debido proceso: ante la asamblea general de copropietarios o el consejo de administración.

La falta se debe responder a través de los protocolos establecidos en el manual de convivencia. En caso de no cumplirse, el afectado puede interponer una acción de tutela por violación al debido proceso y solicitar la nulidad del acto.
Cuáles son los beneficios de vivir en unidades residenciales
Vivir en una asociación de vecinos trae tanto normas como beneficios. Además de cumplir con los pagos, se deben suscribir a los reglamentos para mantener la convivencia y recibir sus beneficios.

Para las personas, vivir en este tipo de unidades les trae importantes bases de seguridad y otras mejoras a la calidad de vida como algunos servicios. Aun así, estas normas pueden ser para algunas personas demasiado restrictivas y prefieren la libertad de u n arriendo individual.











