Este encantador destino austriaco, con apenas 800 habitantes, se encuentra a orillas del lago Hallstättersee y es considerado por muchos el pueblo más hermoso del mundo. Con una historia que abarca 7.000 años, sirvió de inspiración para la famosa película Frozen de Disney.
Rodeado por los Alpes de Dachstein, este pintoresco pueblo montañoso es un destino histórico reconocido como Patrimonio de la Humanidadpor la UNESCO.
¿En qué lugar se halla el "pueblo más bello del mundo"?
Se trata del pueblo de Hallstatt, ubicado cerca de la costa oeste del lago cristalino que lleva su nombre. La zona destaca por sus casas del siglo XVI, construidas en estilo alpino, y por albergar la mina de sal más antigua del mundo.
Su nombre, que significa asentamiento de sal, indica la prosperidad económica del pueblo en la edad media en el negocio de extracción del mineral.
¿Por qué la mina de sal es un patrimonio de la humanidad?
Una de las atracciones turísticas más destacadas en los alrededores, reconocida en 1997 por la UNESCO, es la mina de sal. Este yacimiento se explotó desde el segundo milenio a.C y generó una gran economía en la región.
La prosperidad de la actividad comercial se refleja hasta hoy en el estilo y construcción de las calles de la ciudad ubicada en Austria.
¿Qué actividades hacer en los Alpes durante el verano?
La temporada más popular para viajar a este rincón en los Alpes es en verano, cuando el clima resulta muy agradable durante el día. No solo ofrece impresionantes vistas naturales, sino que también hay diversas actividades turísticas para disfrutar. Las más relevantes son:
- Mina de Sal
- Excavaciones arqueológicas
- Torre de Rudolf
- Mirador 5 fingers
- Cascadas Waldbachstrub
- Lago Hallstättersee
Además de su rica historia, Hallstatt es famoso por su arquitectura pintoresca, que incluye casas de colores vibrantes que se alinean a lo largo de las empinadas calles del pueblo. Este atractivo visual ha convertido a Hallstatt en un popular destino para fotógrafos y amantes de la naturaleza que buscan capturar su belleza única.
El pueblo también alberga un museo dedicado a la historia de la minería de sal, donde los visitantes pueden aprender sobre las técnicas antiguas utilizadas en la extracción del mineral. Este museo complementa la experiencia cultural de Hallstatt, ofreciendo una visión profunda de su legado y su importancia en la economía regional.
