El papa Francisco cumple este martes agenda interna en Río de Janeiro, en el marco de su segundo día de visita a Brasil para participar de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), que comenzó oficialmente hoy. El pontífice no tiene programada ninguna actividad pública y aprovechará el día para descansar en la residencia oficial de la Arquidiócesis de Río, en Sumaré.

El religioso tuvo ayer una extensa ronda de actividades, tras desembarcar en Brasil, que incluyó dese el recorrido en papamóvil por las calles del centro de Rio hasta la recepción con autoridades en el Palacio Guanabara, sede del gobierno del estado.

Sin la presencia del papa, está prevista para esta tarde en Copacabana una misa inaugural de la JMJ, que celebrará el arzobispo de Río, don Orani Tempesta. En ese lugar y en el mismo horario de la actividad religiosa, tendrá lugar la manifestación “Besazo LGBT”, una protesta contra “la creciente homofobia y fundamentalismo religioso en Brasil durante el discurso del Papa en la JMJ”, según una convocatoria vehiculizada a través de las redes sociales.