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Hoy, en gran parte de los Estados Unidos, se espera un panorama principalmente nublado con temperaturas en descenso. Según el National Weather Service (NWS), un sistema de baja presión se desplaza lentamente por el suroeste del país, generando lluvias intensas, tormentas aisladas y riesgo localizado de inundaciones repentinas.
Aunque el informe horario para el país indica niebla matinal, nubosidad persistente y temperaturas máximas suaves (alrededor de los 15 °C) que caerán hacia la tarde-noche, los avisos del NWS apuntan a que las lluvias podrían intensificarse en ciertas zonas y generar complicaciones.
¿Cuáles son las zonas en alerta por lluvias y tormentas?
El NWS advierte que el principal foco de lluvias y tormentas hoy se encuentra en el suroeste de EE.UU., donde un disturbio atmosférico avanza de manera lenta. En su sitio, las autoridades climáticas señalan que “un disturbio meteorológico de desplazamiento lento continuará generando lluvias periódicas, algunas tormentas aisladas y una inundación repentina localizada en el suroeste.”
En estas regiones, las lluvias podrían alcanzar niveles suficientes para provocar inundaciones súbitas en zonas de drenaje pobre o ríos de respuesta rápida.
Por su parte, según reportes de medios meteorológicos, el riesgo de tormentas severas aún es moderado, pero debe mantenerse la alerta por la posibilidad de actividad eléctrica aislada, ráfagas de viento y lluvias concentradas que podrían superar los 20-30 mm en pocas horas en áreas reducidas. Aunque no todas las zonas se verán afectadas, los habitantes del suroeste —y en particular de las Llanuras del Sur, hacia la noche— deberían monitorear los avisos de última hora.
Consejos prácticos ante posible tiempo severo
Para quienes se encuentren en zonas con pronóstico de lluvias y tormentas aisladas, se recomienda lo siguiente:
- Mantenerse atento a los boletines del NWS y a las alertas meteorológicas locales.
- Evitar transitar por calles inundadas o zonas bajas donde el agua pueda acumularse rápidamente.
- No subestimar la posibilidad de corrientes repentinas en arroyos, zanjas o cauces secos, ya que incluso lluvias moderadas pueden provocar crecidas veloces en terreno árido.
- Posponer actividades al aire libre, en especial durante la noche, en las zonas señaladas como de riesgo de tormentas.