Cómo preparar la gelatina casera con más colágeno para fortalecer las articulaciones sin pastillas ni cirugías
Descubre el paso a paso de esta receta sencilla y deliciosa.
El colágeno es una proteína de vital importancia para los músculos, las articulaciones, los tendones, la piel y los cartílagos. Expertos de la prestigiosa Universidad de Harvard detallan que es la más abundante del cuerpo humano y que su función es velar por el bienestar de los tejidos, contribuyendo a que sean más fuertes y resistentes.
Con la edad, el cuerpo disminuye gradualmente su síntesis de colágeno, lo que puede desgastar los cartílagos de las articulaciones y generar fricción entre los huesos, trayendo como consecuencia dolor articular.
La gelatina es uno de los alimentos líderes del podio al pensar en aquellos ricos en esta proteína, pues al elaborarse a base de pieles y huesos de animales aporta colágeno natural. Aquí te contamos cómo puedes prepararla en casa.
Cómo preparar en casa la gelatina rica en colágeno
Este alimento no sólo es valorado dentro del mundo culinario por su composición, sino también por su enorme versatilidad al momento de combinarse con ingredientes de todo tipo.
Si deseas elaborar en casa una gelatina rica en colágeno y perfecta para utilizar a modo de comodín gastronómico, aquí te compartimos la receta
- 3 cucharadas de gelatina neutra (se consigue en todas las tiendas)
- 2 tazas de jugo de bayas
- 1 taza de té de tu preferencia
- Miel o endulzante
Preparación
- Prepara el té y añade las cucharadas de gelatina. Mantén la mezcla en el fuego hasta que los ingredientes se integren entre sí
- Cuando la preparación enfríe, colócala en un recipiente y agrega el jugo de bayas
- Mezcla hasta que alcance una consistencia homogénea
- Endulza con miel si así lo prefieres
- Cubre el recipiente con papel de cocina
- Refrigera durante 120 minutos
Colágeno natural: alimentos que ayudan a estimular su producción
Harvard señala que, si bien el colágeno es una proteína animal, existen otros alimentos que contribuyen a fomentar su producción en el organismo. Los que integran la lista son ricos en los aminoácidos esenciales para su síntesis.
Algunas de las alternativas propuestas por la universidad son huevos, lácteos, soja y legumbres.
El zinc, por su parte, también es esencial para elaborar esta proteína y está abundantemente presente en mariscos, carnes, nueces, legumbres, cereales y semillas. Lo mismo sucede con la vitamina C, que puede encontrarse mayoritariamente en cítricos, verduras de hojas verde, tomates y pimientos.