Elon Musk, actual responsable del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), redujo drásticamente sus proyecciones de ahorro para el gobierno de Estados Unidos, desatando críticas por parte del Partido Demócrata, que ahora exige su salida inmediata del cargo.
El mes pasado, Musk aseguró en una entrevista televisiva que lograría ahorrar 1 billón de dólares al Estado mediante recortes y reformas administrativas. Sin embargo, en una reciente reunión de gabinete con el presidente Donald Trump, rectificó sus estimaciones y anunció que el ahorro estimado será de apenas 150.000 millones de dólares para el año fiscal 2026.
Elon Musk prometió recaudar USD 1 billón, pero no llegará a USD 150 mil millones
El anuncio generó una fuerte reacción entre legisladores y funcionarios. El propio Musk defendió su gestión afirmando:
"Se traducirán en mejores servicios para el pueblo estadounidense. Vamos a gastar el dinero de los impuestos de una forma buena y sensata".
Pese a su tono optimista, la reducción en las proyecciones representa una baja de más del 85% respecto de lo prometido originalmente, y debilita el argumento central que justificó su incorporación al gabinete de Trump.
Exigen que Elon Musk deje el cargo antes del 30 de mayo
El nuevo escenario motivó una ofensiva política por parte de más de 80 congresistas demócratas, quienes han presentado una carta formal dirigida al presidente Trump exigiendo que ElonMusk sea removido del cargo antes del 30 de mayo.
"Exigimos una declaración pública inmediata que deje claro que Elon Musk renunciará y entregará toda autoridad para la toma de decisiones, como lo exige la ley", afirma el documento difundido por los demócratas.
Según la legislación vigente, Musk solo puede ejercer como empleado especial de la Administración por un plazo máximo de 130 días, período que culmina a fines de mayo. Su continuidad más allá de esa fecha sería considerada una violación legal, sostienen los firmantes.
Los legisladores apuntan a posibles conflictos de interés entre su rol público y su red de negocios, que incluye Tesla, SpaceX, la red social X y la empresa Starlink, algunas de las cuales mantienen vínculos contractuales con la propia administración de Trump.
La Casa Blanca defiende a Elon Musk pese a la presión
Desde la Casa Blanca, la portavoz Karoline Leavitt desestimó los rumores sobre una inminente salida de Musk y defendió su gestión al frente del DOGE. En declaraciones recientes, calificó las versiones críticas como "basura" y afirmó: "Musk abandonará el cargo una vez que complete su increíble trabajo".