Entre ellos se encuentra pasear para respirar aire puro. Un paseo por el bosque o el campo no solo resulta placentero, sino que también actúa como una excelente terapia. Con cada paso, inhalamos terpenos, compuestos presentes en los aceites volátiles de las plantas, especialmente en coníferas y cítricos.
Es sorprendente pensar que nuestros bosques funcionan como una farmacia natural. Estos espacios verdes nos ofrecen beneficios que van más allá de lo visual, contribuyendo a nuestro bienestar físico y mental.
Los beneficios que aporta a la salud respirar aire puro
Los terpenos son compuestos naturales que benefician nuestro organismo al fortalecer el sistema inmunológico y la flora intestinal, además de ofrecer un efecto relajante, mejorar nuestro estado de ánimo y brindar protección contra la depresión.
Pasear durante 30 minutos por el bosque puede reducir la hormona del estrés, la adrenalina, hasta en un 30%. Además, estas caminatas son especialmente beneficiosas para quienes padecen hipertensión arterial, ya que ayudan a mantener la elasticidad de las venas y a prevenir enfermedades cardíacas.
¿Por qué respirar aire puro alarga la esperanza de vida?
Según expertos japoneses, caminar regularmente en entornos forestales puede
aumentar la esperanza de vida hasta en 7 años
. Este tipo de actividad también estimula las células asesinas del cuerpo, que son fundamentales en la lucha contra virus y células cancerígenas.