

El mundo minero se vio sacudido por una revelación histórica: en 2023, un país asiático confirmó el descubrimiento de una de las reservas de oro más grandes de la Tierra. El hallazgo no solo sorprende por su magnitud en términos de volumen, sino también por el valor económico estimado, que asciende a más de 36.000 millones de dólares.
La información fue confirmada por el Ministerio de Recursos Naturales de China, que detalló que las reservas corresponden a la mina Xiling, en la provincia de Shandong. Con este anuncio, la nación se posiciona de manera aún más sólida como potencia mundial en la producción de metales preciosos.
Hallazgo sin precedentes: el descubrimiento en China valuado en millones de dólares
China es uno de los países con mayor cantidad de descubrimientosarqueológicos que involucran oro. Los estudios geológicos sobre la mina Xiling revelaron un incremento de más de 200 toneladas de oro elevando el total a unas 592,2 toneladas. Esta cifra convierte al yacimiento en uno de los más grandes conocidos en el planeta y garantiza una producción sostenida durante varias décadas.
Los cálculos oficiales indican que el valor de estas reservas, tomando como referencia el precio del oro en 2023 (cerca de 1.900 dólares por onza troy), supera ampliamente los 36.000 millones de dólares. Esta estimación refuerza la importancia estratégica de Xiling no solo para la economía nacional, sino también para el mercado global.

La agencia estatal Xinhua, junto con el respaldo del Ministerio de Recursos Naturales, calificó este descubrimiento como un hito en la historia minera del país.
¿Qué impacto tiene está investigación en la economía global?
Todos los descubrimientos arqueológicos de oro impactan, indirectamente, en la cotización de este material precioso y la dinámica del mercado internacional. Con más de medio millón de toneladas disponibles, la mina coloca a este país en una posición privilegiada para influir en la oferta mundial del metal precioso.

Además, este hallazgo fortalece la seguridad de suministro interno, permitiendo afrontar con mayor solidez eventuales crisis económicas o tensiones en los mercados financieros. El oro, considerado un activo refugio, se convierte así en una herramienta estratégica para la estabilidad del país.














