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Un hallazgo arqueológico en el Reino Unido dejó sorprendida a la comunidad científica internacional: se desenterró uno de los mayores tesoros de monedas romanas jamás encontrado en suelo británico. La magnitud del descubrimiento y su excelente estado de conservación lo convierten en una pieza clave para entender la historia del imperio en estas tierras.
El tesoro fue encontrado en Devon, al suroeste de Inglaterra, donde un detectorista local localizó una concentración inusual de objetos metálicos bajo tierra.
Tras una excavación arqueológica, se confirmó que se trataba de un conjunto de aproximadamente 22.000 monedas romanas de los siglos III y IV d.C., que formaban parte de un ocultamiento intencional durante un periodo de inestabilidad política y económica.
Hallazgo del siglo: desentierran monedas de oro y encuentran uno de los mayores tesoros
El descubrimiento fue supervisado por especialistas del British Museum y del Portable Antiquities Scheme, que confirmaron la autenticidad y antigüedad de las piezas. Los arqueólogos señalaron que el conjunto estaba compuesto mayormente por monedas de bronce y plata, aunque también incluía ejemplares de oro, lo que demuestra la circulación de riqueza en la provincia romana de Britania.

El tesoro fue trasladado al Royal Albert Memorial Museum (RAMM) en Exeter, institución que actualmente conserva y exhibe parte de las monedas. Los expertos coinciden en que este hallazgo no solo es uno de los más grandes registrados en el Reino Unido, sino que además ofrece una ventana directa al contexto económico de la época, marcada por guerras civiles y crisis imperiales.
¿Por qué este hallazgo es importante?
Según los arqueólogos, el Seaton Down Hoard, como se le conoce, pudo haber sido enterrado deliberadamente como forma de resguardo ante la inestabilidad del periodo. La datación de las monedas coincide con las décadas en que el Imperio Romanoenfrentaba divisiones internas y amenazas externas.

La magnitud del hallazgo y su preservación permiten estudiar patrones de acuñación, comercio y circulación monetaria en Britania. Para los especialistas, el descubrimiento es considerado una "cápsula del tiempo" que confirma cómo la provincia británica estaba profundamente integrada al sistema económico del imperio.














