Las elecciones no generarán cambios bruscos en la economía este año ni se esperan grandes sorpresas, según Juan Pablo Do Carmo, gerente general de Teradata Argentina, una empresa que cotiza en Bolsa en Nueva York, enfocada en utilizar datos para convertirlos en valor y tornar más eficientes los negocios de las empresas, un servicio conocido como Business analytics o Business intelligence.
En una entrevista con El Cronista, Do Carmo destacó que 2014 fue un buen año para Teradata, y que prevé que 2015 sea similar, sin cambios bruscos en la economía local, más allá de quien gane las elecciones.
"Nos enfocamos en sacar agua de las piedras. Hay dos momentos en que nos va bien: cuando la economía crece y todos compran nuestras soluciones y cuando se desacelera, porque las empresas ven en nuestro servicio la posibilidad de bajar costos para vender. Por eso 2014 fue buen año. Podríamos haber crecido mucho más si no fuera por la devaluación de enero, que nos afectó, porque medimos nuestra facturación y objetivos en dólares. Los servicios se hacen con gente local, pero el hardware y software se importan, por eso se mide en dólares. Crecimos dos dígitos en la Argentina", destacó Do Carmo.
Entonces el actual contexto también los beneficia...
El contexto no es alentador, es más fácil hacer negocios cuando todos crecen; pero las empresas invierten en estos servicios porque apuestan a generar más valor de negocio. Aprendieron con los años que cuando la economía se desacelera no hay que frenar las inversiones; analizan las posibilidades e invierten. Porque ya saben que, si no lo hacen, cuando las ventas mejoran les costará mucho más retomar el negocio. Por eso muchas empresas mantienen un nivel razonable de inversión, para estar preparados cuando la economía se acelere.
¿Tuvieron algún inconveniente para operar?
Se nos demoraron los negocios por no cumplir con toda la reglamentación para importar, hasta que presentamos todo lo requerido, pero seguimos operando bajo las nuevas reglas. La demora a veces es de semanas, otras meses. Pero aprendimos a operar con la nueva reglamentación. Sí nos afectó la inflación, porque se acomodan los salarios y, cuando el dólar se mantiene estable, se genera un costo mayor. De todos modos, los servicios que exportamos son de alto valor agregado, podemos ajustar y transferir el mayor costo, porque el servicio es muy valorado, nos siguen comprando. Manejamos América latina, México y Brasil incluidos, desde la Argentina, con filiales en algunos países.
¿Cuáles son las expectativas para este año?
Arrancamos enero cerrando muy buenos negocios; esperamos un año parecido a 2014, con algún cambio en función de las elecciones hacia fin de año, pero de todos modos no veo que haya un gran salto o cambio brusco en la economía. Será un año parecido, ni bueno ni malo. Para nosotros será un año excelente, esperamos crecer dos dígitos en moneda constante, en dólares, porque tenemos negocios muy avanzados. Esperamos que se mantenga el tipo de cambio, se va a ir devaluando pero no veo un cambio abrupto.
¿Cómo incidirán las elecciones?
Si cambia el gobierno, va a generar una expectativa diferente, positiva, puesta en lo que el ganador diga que hará. Si sigue el Gobierno, ya se sabe con qué economía se va a convivir, no va a haber sorpresas. Pero creo que en ninguno de los casos habrá un salto brusco o crisis. Nosotros planeamos seguir contratando gente y exportando servicios a América latina.
¿Cuesta todavía conseguir recursos humanos en sistemas?
Los recursos siguen siendo escasos. Hoy tenés tecnología en todos lados. Creció la cantidad de estudiantes, pero no se llega a generar una cantidad de profesionales suficiente en función de las búsquedas, para cubrir la demanda. Sobre todo cuesta encontrar perfiles más específicos.
¿Recomendarías estudiar carreras afines?
Sí, porque los profesionales son escasos y todo el tiempo hay nuevas tecnologías. Recomendaría cualquier carrera vinculada a la tecnología, desarrollo de software, hardware, porque tenés tecnología en todos lados, incluso hasta en los sistemas de iluminación.