Los fundadores de La Alazana, Lila Serenelli y Néstor Serenelli, y de Manush Brewery, Martín García y Fernando García, expusieron en el panel Casos de Éxito que trató sobre la importancia de innovar en los sistemas productivos de los emprendimientos y la sustentabilidad para un producto de calidad.

Serenelli aseguró que comenzaron a "diseñar un sueño que tuvimos desde siempre y que logramos plasmar en realidad cuando compramos la chacra que tenemos en Lago Puelo e instalamos la destilería".

Lila Serenelli agregó que "al principio, no teníamos un enfoque turístico, pero el lugar en el que decidimos instalarnos coincidió con un corredor turístico muy importante y eso nos obligó a cambiar el enfoque original del emprendimiento"

Y dijo: "mucha gente viene a conocer la destilería y también realiza degustaciones para poder conocer nuestros productos, que sólo se pueden adquirir allí".

Por la parte de Manush, Fernando García comentó que "Martín fue el creador original del emprendimiento, que con el correr del tiempo, termina envolviendo a toda la familia. Cada uno aportó desde las carreras que fue estudiando y así llegamos a abrir el primer local en año nuevo del 2012".

El fundador del emprendimiento cervecero remarcó que "originalmente fue muy chiquito, pero con el grado de conocimiento que tomó la cerveza, nos sirvió mucho para incrementar la distribución en latas que surgió después de la pandemia originalmente".

Las distancias entre la Patagonia y la Capital hace que los emprendedores tengan que sortear este problema, o buscar alternativas, a la hora de comerciar sus productos. Los fundadores de Manush Brewery y La Alazana dieron su punto de vista con respecto a este tema.

Martín García reconoció que "la fuerza principal la tenemos en Bariloche y el resto de la Patagonia. Llegar a Capital implica costos muy elevados comparados con la competencia, pero buscamos seguir bajándolos".

El caso de La Alazana es bastante particular por la zona en la que se encuentra. Néstor Serenelli aseguró que desde la compañía "hacemos un producto 100 % local y eso hace que se reduzca bastante este problema".

Y agregó: "Sembramos nuestra propia cebada, hacemos nuestra propia malta y también el proceso completo desde el campo hasta la botella, creo que esto es lo que hace más lindo e interesante a nuestro emprendimiento".

Serenelli destacó que desde su empresa "toman el agua tal cual viene desde el deshielo tal cual llega, algo que es muy importante para la producción del whisky. El agua que utilizamos desde la vertiente, es la justa y necesaria, lo que sobra, es devuelta a su cauce".

García afirmó que "dentro de Manush tenemos una planta de tratamiento de efluentes que nos permite separar los residuos sólidos de la producción de cerveza. Hace 10 años estamos tratando los residuos orgánicos para que no vuelva al lago y para no sobrecargar la planta local en Bariloche".