Los problemas financieros comenzaron a socavar la cotización de Autlán, que vio cómo su acción perdió brillo en la Bolsa Mexicana de Valores, arrastrada por un entorno adverso para los metales.

Durante la jornada del lunes, el título de la minera encabezó las caídas del centro bursátil con un retroceso de 5.08%, al descender hasta los MXN $7.10 por acción (Ciudad de México, 10:57 horas), aunque logró recortar parte del terreno perdido hacia el cierre de la sesión.

El golpe más reciente vino desde el frente crediticio. El viernes, la calificadora Verum recortó la nota de la compañía, propiedad de la familia Rivero González, a “A-/M” desde “A/M” ante la presión prolongada sobre la rentabilidad y el flujo de efectivo, derivada de la menor demanda de acero y la apreciación sostenida del peso mexicano.

“Este entorno ha mantenido los indicadores de apalancamiento en niveles elevados por un periodo mayor al previsto”

señaló la agencia en su reporte.

Las cifras operativas también reflejan el desgaste. Al tercer trimestre, Autlán reportó una caída de 13% en las ventas netas, que se ubicaron en u$d 78.4 millones, afectadas por un menor volumen de exportación de nódulos de manganeso y precios más débiles en algunos de sus productos.

“El mercado nacional se ha visto presionado por la disminución temporal en las operaciones de un cliente clave, lo que redujo considerablemente la demanda doméstica y generó volatilidad en los volúmenes”, detalló la calificadora en un documento.

El deterioro se reflejó en la última línea del estado de resultados: la minera registró una pérdida neta de u$d 10.4 millones, frente a la utilidad de 4.3 millones del mismo periodo de 2024.

Pese al panorama, Verum no cerró por completo la veta de optimismo. La agencia mantuvo la perspectiva estable, al anticipar una mejoría gradual en los niveles de apalancamiento conforme se consolide la diversificación de los ingresos.

“La agencia considera una recuperación paulatina respaldada por la estrategia de diversificación, destacando la reactivación de la mina de metales preciosos, que busca fortalecer la generación de flujo de efectivo y apuntalar una estructura de capital más sólida”, explicó.

En lo que va del año, y pese a su baja bursatilidad, las acciones de Autlán aún registran un avance acumulado de 10%, mostrándose resilientes en medio de un panorama operativo todavía inestable.