

¿Sientes que cada vez compras menos productos básicos con el dinero que tienes? Esta es la situación de prácticamente todos los mexicanos que enfrentan una inflación mayor en la canasta básica ampliada, incluso con la implementación del Paquete contra la Carestía y la Inflación (Pacic).
Este acuerdo fue creado por el expresidente Andrés Manuel López Obrador en mayo de 2022, pues una vez que se recuperaron las actividades normales después de la pandemia de Covid-19, la inflación se aceleró y tuvo un profundo impacto en los bolsillos de los mexicanos.
El indicador tocó su punto más alto en agosto de 2022 con un incremento anual de 8.7%, una cifra no vista en México desde principios de este siglo.
El Pacic fue implementado por primera vez en mayo de 2022 por la administración federal anterior e incluyó la participación de la iniciativa privada y los principales productores del país.
El objetivo era mantener 24 productos a un precio bajo para evitar un impacto mayor en los bolsillos de los mexicanos en situación de pobreza extrema.
Sin embargo, de acuerdo con el extinto Consejo Nacional para la Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), para superar la Línea de la Pobreza, es necesario contar con recursos suficientes para cubrir 40 productos básicos por cada integrante de la familia.
Para Oscar Ocampo, analista del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), el Pacic ha tenido un impacto “cercano a cero” en la inflación nacional.
Este miércoles, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció la renovación del Pacic, que tiene el objetivo de mantener el precio de la canasta básica en MXN $910.
Sin embargo, de acuerdo con datos del Inegi, el precio de la canasta básica a octubre de este año en el ámbito rural -el más económico- fue de MXN $1,844.15.
“Lo que tendríamos que revisar es si con esta contención de los MXN $910 se está resolviendo el problema de la canasta básica alimentaria y no alimentaria”
Medición incorrecta
Sofia Ramírez, directora del think tank México ¿cómo Vamos?, aclaró que la canasta básica alimentaria de las zonas urbanas del país cuenta con 42 rubros de gasto, que incluye alimentos y bebidas fuera del hogar, mientras que en la rural suman 39. Esta cifra es superior a los 24 productos que incluye el Pacic.
La especialista explicó que la diferencia entre la canasta básica y la del Pacic se debe a que el acuerdo tiene fines netamente políticos.
“La (canasta) del Pacic es un acuerdo político y la canasta básica alimentaria está hecha con base en análisis sociológico y antropológico que efectuó el Coneval, para saber en promedio cuál es la dieta de las y los mexicanos y en qué rubros de gasto adicionales a la comida se destina el dinero y entonces con base en eso se hace este cálculo utilizando y aprovechando pues toda la información que ya recaba el Inegi en términos del índice nacional de precios al consumidor”, aclaró.
Impacto limitado
Ambos especialistas coincidieron que la iniciativa resulta insuficiente para tener un impacto en el poder adquisitivo de las personas en situación de pobreza.
“En términos de inflación te diría que su impacto ha sido casi prácticamente nulo (...) salvo en el caso de las gasolinas. (El Pacic) es una política que puede generar distorsiones y que tiene sus costos”, comentó Oscar Ocampo a El Cronista.
El especialista del organismo mencionó que los índices de inflación de los productos agropecuarios, que tienen una participación importante en la canasta básica, dependen mucho más de lo que pase en el mercado internacional, como las sequías, la producción o problemas que alcanzan delitos como la extorsión.
“A nivel macro en términos generales tu impacto en la inflación es cercano a cero”, reiteró.
“El tema del Pacic pudiera parecer una buena idea, mientras sea una intencionalidad; sin embargo hay varios apuntes que hacer”, dijo Sofía Ramírez.
Uno de ellos es que la canasta del Pacic no incluye segmentos de gasto como transporte público, limpieza y cuidados personales, educación, cultura, comunicaciones, servicios para vehículos, vivienda, conservación de la vivienda, vestido y calzado, cristalería, cuidados de la salud, enseres domésticos, artículos de esparcimiento, transporte y otros gastos.
Añade que una persona necesita al menos 80 pesos diarios para cubrir sus gastos y que la canasta básica alimentaria equivale a MXN $2,454.74 al mes por persona en zonas urbanas, mientras que en zonas rurales se ubica en MXN $1,850.65.
“Lo que tendríamos que revisar es si con esta contención de los MXN $910 se está resolviendo el problema de la canasta básica alimentaria y no alimentaria”, comentó.
¿Cuánto cuesta la canasta básica ampliada?
El costo de la canasta básica ampliada que incluye los productos mínimos alimentarios y no alimentarios para tener una vida digna en México cerró en octubre en MXN $4,756 pesos por persona en las zonas urbanas, que concentran a ocho de cada 10 mexicanos.
De acuerdo con datos del Inegi, el costo de la canasta básica ampliada urbana tuvo un incremento anual de 4.3%, que fue superior a 3.9% de la inflación general.
Para una familia de cuatro personas, es necesario tener prácticamente 20 mil pesos mensuales para superar la línea de la pobreza.














