

Lo que alguna vez se percibió como un furor por los vehículos ligeros chinos parece haber llegado a su fin en el mercado mexicano, pues prácticamente todas las marcas de ese país tuvieron un desplome en las ventas de unidades nuevas durante los primeros 11 meses del año, refieren datos de la industria.

Hasta el año pasado, una invasión de marcas asiáticas se apoderó de las calles del país. Actualmente, existen más de 20 marcas chinas de autos en México, entre las que destacan nombres como MG Motor, Chirey, GWM o JAC, cuya llegada revolucionó el panorama del mercado mexicano.
Sin embargo, la bonanza parece haber quedado atrás. De acuerdo con el Registro Administrativo de la Industria Automotriz de Vehículos Ligeros, entre enero y noviembre de este año, hubo una caída generalizada en la venta de unidades ligeras de marcas de ese país, contrario a un pequeño crecimiento del mercado general.
El Inegi reportó que en los primeros 11 meses del año en el país se vendieron 1.37 millones de autos nuevos, lo que representó un alza de 0.96%.

Freno de mano
La caída en la venta de autos chinos en México fue liderada por marcas como Chirey (-77.6%) y MotorNation (-72.7%), pero se extendió en prácticamente todo el segmento.
El Inegi reportó que MG Motor, la marca china más grande en el país por volumen de ventas, tuvo una caída anual de 14.7% en el periodo de referencia. El año pasado, la compañía colocó 51,244 unidades nuevas, mientras que para 2025 el número cayó a 43,708 autos nuevos.
La contracción, opina Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Banco Base, proviene de la incertidumbre de la política arancelaria que impulsa el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
“(La caída en las ventas de autos nuevos) es parte del miedo a la política proteccionista de Donald Trump, que está muy encaminada hacia la guerra comercial con China”, dijo a El Cronista.
Además, a futuro, la especialista prevé un panorama complejo. Recordó que el gobierno mexicano, a través de la Secretaría de Economía, que lidera Marcelo Ebrard, analiza poner un arancel de hasta 50% a las importaciones de autos de ese país.
“Entonces, las refacciones para estos carros se van a encarecer y existe el miedo de que pueda haber un mayor proteccionismo de Estados Unidos que impida, por ejemplo, a los autos que se compraron en México pero que son chinos, pasar hacia Estados Unidos, o que en algún momento se deje de vender en México y entonces qué va a pasar con las refacciones”, advirtió.














