El entusiasmo que alguna vez generó el anuncio de la llegada de Elon Musk a México ha comenzado a apagarse. Aunque las autoridades estatales insisten en que el proyecto de Tesla sigue vigente, los indicios en el terreno y en el ambiente industrial de Nuevo León cuentan una historia diferente.
Mientras tanto, una decisión pendiente en Estados Unidos podría definir si Tesla concreta su plan o se convierte en otra promesa pospuesta.
Elon Musk apuesta por el "Cybertaxi", pero el futuro depende de Estados Unidos
En marzo de 2023, Elon Musk anunció con bombo y platillo la instalación de una planta de Tesla en Santa Catarina, Nuevo León. Sin embargo, más de un año después, los anuncios publicitarios han sido retirados, no hay maquinaria en el sitio y las expectativas de los proveedores locales se han diluido. A pesar de esto, Emmanuel Loo, encargado del despacho en la Secretaría de Economía estatal, asegura que la relación con la compañía estadounidense sigue activa y que el plan aún contempla una planta de manufactura en México.
Uno de los motivos detrás del retraso sería el cambio de prioridades dentro de Tesla. La empresa ha puesto su enfoque en el desarrollo del "Cybercab" o "Cybertaxi", un modelo autónomo que promete revolucionar el transporte. No obstante, su producción depende de la aprobación legal en Estados Unidos, principal mercado al que apunta la compañía. Aunque Tesla ya recibió una primera aprobación en California, el vehículo aún no cuenta con luz verde definitiva para su comercialización.
El propio Musk ha dicho que el "Cybertaxi" podría entrar en producción en 2026, con un precio estimado menor a los 30,000 dólares. Para que esto sea viable, es indispensable que los permisos regulatorios avancen, pues ninguna empresa apostaría por una fábrica para un modelo que todavía no puede venderse.
Tesla en Santa Catarina: promesa en pausa y tensiones por tarifas arancelarias
La inversión de Tesla en México, valuada en 5,000 millones de dólares, se realizó conforme a sus políticas internas. Aun así, en el predio de Santa Catarina, la actividad es nula. A diferencia de los terrenos vecinos, donde se ve algo de movimiento, el espacio destinado para la planta muestra señales de pausa: torres eléctricas sin conectar, ausencia de maquinaria y letreros que prohíben el paso.
Según le dijo Manuel Montoya, director del Clúster Automotriz de Nuevo León (CLAUT) a Expansión, la falta de avances concretos ha inhibido la llegada de nuevos proveedores al estado. Aunque unos 60 proveedores de la región abastecen a Tesla, lo hacen para su planta en Austin, Texas, no para un complejo en México. Para Montoya, el anuncio de la planta no se tradujo en acciones, por lo que la industria considera que el proyecto está en pausa.
A esto se suma el clima de incertidumbre generado por la política comercial de Estados Unidos. Las recientes posturas arancelarias restrictivas, particularmente ante la posibilidad de un regreso de Donald Trump a la presidencia, han encendido las alarmas. Musk mismo advirtió en 2023 que, bajo un gobierno republicano, no tendría sentido invertir fuertemente en México debido a las tarifas que podrían imponerse.