Dzhokhar Tsarnaev, uno de los dos sospechosos de perpetrar los atentados de Boston, sigue grave en un hospital y se comunica por escrito con los investigadores, mientras ayer fue acusado formalmente de cargos que conllevan la pena de muerte y se anunció que será juzgado por un tribunal civil.
Tsarnaev, de 19 años, fue detenido el pasado viernes e ingresó con lesiones en la cabeza, cuello, piernas y una mano producidas durante el tiroteo en el que falleció su hermano de 26 años, Tamerlan.
Los dos hermanos Tsarnaev, de origen chechén, son sospechosos de colocar las dos bombas que explotaron hace una semana al lado de la línea de meta del popular maratón de Boston y que provocaron 3 muertos, así como más de 200 heridos.
El secretario de Justicia, Eric Holder, informó de los cargos contra el joven, que incluyen el uso de armas de destrucción masiva contra personas y propiedades. Poco antes, el vocero de la Casa Blanca, Jay Carney, había anunciado que no sería tratado como combatiente enemigo y que lo juzgará por tanto un tribunal civil.
De ser hallado culpable Dzhokhar Tsarnaev podría ser condenado a muerte o a prisión de por vida. La primera audiencia judicial será el 30 de mayo.