Benedicto XVIfalleció a los 95 años y el Vaticano ya empieza a diseñar cómo serán los funerales en los que participará Francisco y que durarán tres días para que los fieles puedan despedir al líder católico.
Benedicto XVI condujo la iglesia católica desde 2005 a 2013, cuando renunció y dejó paso al primer pontífice americano, el argentino Jorge Bergoglio que se transformó en Francisco y aún sigue al mando del obispado de Roma. Pero el fallecimiento del primer papa en renunciar en casi 800 años es un hecho histórico.
Con 95 años, Benedictofa lleció en Mater Ecclesiae, un monasterio dentro del vaticano que lo acogió en sus últimos años y que también lo vio transitar las horas finales del llamado Joseph Aloisius Ratzinger durante su tiempo previo al pontificado.
"Puedo confirmar que en las últimas horas se ha producido un agravamiento por el avance de la edad", informó el director de la oficina de prensa del Vaticano, Matteo Bruni, y Francisco pidió "una oración especial por el papa emérito Benedicto, que en el silencio está sosteniendo a la Iglesia" en las jornadas previas al deceso.
Cómo será el funeral de Benedicto XVI
"El funeral de un papa emérito es el funeral del obispo emérito de Roma", dijo el historiador eclesiástico Alberto Melloni sobre las ceremonias que se esperan que sucedan tras el fallecimiento de Benedicto XVI.
Para los conocedores de los pasillos vaticanos, los rituales funerarios del papa emérito se asemejarán mucho a los de un líder católico en ejercicio: un funeral en la Basílica de San Pedro o en la plaza, en este caso presidido por Francisco -en lugar del decano del colegio cardenalicio- y sepultura en la gruta debajo de la basílica.
Se espera que el cuerpo repose unos días en la basílica de San Pedro con una capilla ardiente para que los fieles puedan despedirse y luego se realizará la ceremonia con representantes de distintas naciones del mundo ya que se despide a un jefe de estado.
Según la web especializada Il Sismógrafo, Benedicto manifestó una sola última voluntad: ser enterrado en el nicho de la cripta de la Basílica de San Pedro en el que ya estuvieron sus predecesores Juan XXII (de 1963 a 2001) y Juan Pablo II (de 2005 a 2011), luego transferidos a la superficie de la Iglesia vaticana al ser canonizados.