La Verificación Técnica Vehicular (VTV) es un requisito indispensable para circular por calles, avenidas, rutas y autopistas en Argentina. Este control busca garantizar que los vehículos estén en condiciones seguras para transitar.
En la provincia de Buenos Aires, las inspecciones de la VTV se realizan bajo el Manual de Procedimientos de la Dirección Provincial de Tránsito. El objetivo es reducir riesgos de accidentes ocasionados por fallas mecánicas o elementos fuera de norma.
La normativa establece parámetros claros sobre el estado general del vehículo, incluyendo carrocería, paragolpes y accesorios externos. Cada componente es evaluado bajo criterios específicos para determinar si cumple con las condiciones mínimas de seguridad.
El incumplimiento de estas disposiciones puede derivar en el rechazo de la VTV, lo que impide circular legalmente en el territorio provincial.
Los elementos del guardabarros que hace que te rechacen la VTV
Según la reglamentación vigente, los guardabarros deben estar completos y en buen estado. No se permite la presencia de elementos que sobresalgan del contorno del vehículo, ya que representan un riesgo para terceros.
La sección 9.2 del Manual indica que cualquier accesorio, soporte o guincho que exceda el contorno sin estar homologado será considerado defecto grave. Esto puede derivar en la imposibilidad de aprobar la inspección.
El inspector verificará que no existan roturas que impliquen desprendimiento. Las roturas mínimas que no comprometan la seguridad pueden ser aceptadas, siempre que no generen riesgo.
En el caso de vehículos modificados, se revisará que las adaptaciones respeten las normas de seguridad y no alteren la funcionalidad del guardabarros.
Paragolpes: medidas y requisitos establecidos por la VTV
Los paragolpes deben mantener la distancia respecto al piso definida por el fabricante. Para vehículos modificados, la normativa orientativa establece límites máximos: 450 mm para el delantero y 500 mm para el trasero.
El procedimiento de control se realiza mediante observación directa y herramientas simples como cinta métrica. No se utilizan equipos complejos para esta verificación.
Se considera defecto grave la presencia de paragolpes rotos, deformados o con piezas faltantes que impliquen riesgo de desprendimiento. También se prohíben defensas adicionales, enganches delanteros o traseros y estribos no originales.
El inspector corroborará que no existan elementos sobresalientes del plano vertical del paragolpes, como malacates o accesorios no homologados.
Accesorios y modificaciones: qué está permitido
La normativa indica que cualquier accesorio instalado debe estar homologado por el fabricante o cumplir con las disposiciones oficiales. Esto incluye soportes, escaleras, ruedas de auxilio y defensas.
Los vehículos que presenten modificaciones fuera de norma serán rechazados en la inspección. El objetivo es evitar riesgos para peatones y otros conductores.
En camiones y remolques, se controlará que las piezas coincidan con el fin de la caja. Se prohíben bumpers o accesorios similares que no estén homologados.
El incumplimiento de estas disposiciones puede derivar en la imposibilidad de obtener la VTV, lo que impide circular legalmente.
Criterios de evaluación durante la inspección
El verificador aplicará criterios claros para determinar el estado general del vehículo. Se revisarán faltantes, roturas y piezas con peligro de desprendimiento.
Se controlará que no existan elementos que sobresalgan del contorno del vehículo, ni accesorios que representen riesgo. Las defensas adicionales y enganches no originales son motivo de rechazo.
El procedimiento busca garantizar que todos los vehículos cumplan con las condiciones mínimas de seguridad establecidas por la Dirección Provincial de Tránsito.