La historia ha demostrado año tras año que los cambios son parte del progreso del mundo, pero en el siglo XXI ese proceso se aceleró a causa de la tecnología y sus avances. ¿Cómo será la manera de trabajaren 2050? La siguiente predicción podría dar respuesta esa incógnita.
Dentro de 27 años, los trabajos y sus métodos podrían no ser los mismos. Por eso es importante estar preparados para cualquier adversidad y adecuarse al mundo que día a día nos toca. ¿Preparado para ver cómo puede ser el ámbito laboral en 2050?
Cómo dice la ciencia y sus expertos que será el mundo para 2050
Si bien la Inteligencia Artificial, establecida de diferentes modos y en diferentes aplicaciones, ya inició un cambio rotundo, en donde cada individuo realiza sus trabajos o estudia con ayuda de la IA, todavía queda mucho por recorrer.
Según el medio británico DailyMail, en poco más de 25 años el mundo ya no será el que conocemos, por lo menos en lo que al trabajo respecta, ya que se avecinan cambios irreversibles gracias a la tecnología.
Las 3 predicciones sobre cómo será el trabajo para 2050
En primer lugar, George Stakhov, director de estrategia de DDB EMEA, le advirtió al medio inglés sobre un futuro donde las personas que dominen las IA tendrán un control abrumador, por lo que privarán al 99% de la población de sus derechos y los convertirán en siervos digitales.
Además, dio un consejo: no sobreestimar los efectos de la tecnología a corto plazo y, mucho menos, subestimar el efecto a largo plazo.
En segundo lugar, el biohacking, un fenómeno emergente, toma protagonismo en la visión de Heather Delaney, fundadora de Gallium Ventures. La implantación común de chips dentro de los cuerpos abre las puertas a una revolución en el bienestar humano.
Con esto podrían aparecer nuevas herramientas en el cuerpo humano, que permitirían monitorear la salud y realizar acciones cotidianas mediante implantes.
En tercer y último lugar, Raymond Kurzweil, director de ingeniería de Google y futurólogo, pinta un escenario donde la fusión entre humanos y máquinas marca la llegada de un cambio real en la humanidad y en el trabajo.
Con la conexión directa de cerebros a máquinas, la inteligencia humana alcanzaría niveles inimaginables. Este hito está previsto, según Ray, para 2045, planteando desafíos existenciales y redefiniendo la comprensión sobre lo que significa ser humano.