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La Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano atraviesan una aparición masiva de chinches de agua (familia Belostomatidae). Aunque su aspecto puede generar temor, es fundamental entender por qué están acá según la ciencia.

Lo que muchos confunden con una plaga de “cucarachas gigantes” es, en realidad, un fenómeno migratorio natural impulsado por las altas temperaturas. Esto es estacional y suele desaparecer en pocos días una vez que las temperaturas bajan o los insectos logran reubicarse en entornos naturales.

¿Por qué Buenos Aires se llenó de chinches de agua?

No es una plaga urbana común como la de las cucarachas, sino un fenómeno natural impulsado por el clima. Estas “nipas” o “cucarachas de agua” viven habitualmente en el Delta del Paraná y en lagunas de la provincia, pero en estos días se mudaron a la ciudad por tres razones:

  • El calor extremo de diciembre: Las altas temperaturas aceleran su ciclo de vida y las obligan a buscar nuevos espejos de agua para sobrevivir y reproducirse.
  • Atracción por las luces: Son insectos que vuelan de noche y se orientan por la luz. En la ciudad, se encandilan con la iluminación LED de los edificios y carteles, terminando por accidente en patios y departamentos.
  • Búsqueda de humedad: Al ser insectos acuáticos, cualquier acumulación de agua (una pileta, un desagüe o incluso un balde) les resulta atractiva para aterrizar. Cuando sus hábitats naturales sufren cambios bruscos de temperatura o nivel, estas chinches migran masivamente.
Fuente: Archivo

El peligro real de las chinches de agua: ¿qué tan riesgosas son?

Desde el punto de vista sanitario, la Sociedad Entomológica Argentina y especialistas del CONICET coinciden en que estos insectos no representan una amenaza grave para la población.

No transmiten enfermedades. A diferencia del mosquito Aedes aegypti o la vinchuca, la chinche de agua no porta patógenos para el ser humano.

El peligro de la mordedura

Su defensa principal es una mordedura mecánica. No son agresivas, pero muerden si se sienten presionadas o si intentás manipularlas con la mano.

No es venenosa en términos de toxicidad sistémica, pero el dolor es intenso y punzante, similar o superior al de una picadura de abeja, y puede generar una reacción inflamatoria local.

Recomendaciones: qué hacer si encontrás una chinche de agua

Para convivir con este fenómeno pasajero de forma segura, los especialistas recomiendan:

  • Evitá el contacto directo: Si necesitás sacarla de tu casa, usá un balde, una escoba y una pala. Nunca la agarres con la mano, ni siquiera con guantes de tela.
  • Reducí la intensidad de las luces exteriores en balcones y patios durante las noches de mucho calor.
  • El uso de mosquiteros es la herramienta más eficaz para evitar ingresos accidentales.
  • No utilices venenos: Los insecticidas hogareños no suelen ser efectivos contra estos ejemplares grandes debido a su duro exoesqueleto y terminás contaminando innecesariamente tu hogar.