En esta noticia

Cada vez se detectan más casos de cáncer de tiroides, un tipo de tumor que suele avanzar en silencio y que afecta sobre todo a mujeres. Aunque puede no presentar síntomas al principio, si se diagnostica a tiempo, las probabilidades de curación son muy altas.

Por qué aumentaron los casos de cáncer de tiroides

Según la prestigiosa Mayo Clinic, los casos están en aumento, en parte gracias al avance en estudios por imágenes como ecografías, tomografías y resonancias.

Estos permiten detectar tumores pequeños que, de otro modo, podrían pasar inadvertidos.

Cáncer de tiroides: síntomas a los que hay que prestar atención

En etapas tempranas, el cáncer de tiroides no suele presentar síntomas. Sin embargo, a medida que avanza, pueden aparecer signos como:

  • Bulto en el cuello

  • Ronquera persistente

  • Dificultad para tragar

  • Dolor en el cuello o garganta

  • Ganglios inflamados

  • Presión en el cuello al usar ropa ajustada

Factores de riesgo: ¿quiénes tienen más posibilidades de desarrollar cáncer de tiroides?

Algunos factores que pueden aumentar las probabilidades de desarrollar este tipo de cáncer son:

  • Ser mujer: afecta más a mujeres, posiblemente por acción del estrógeno.

  • Exposición a radiación: sobre todo en cabeza o cuello durante la infancia.

  • Genética: hay síndromes hereditarios que elevan el riesgo, como la neoplasia endocrina múltiple.

Cómo se diagnostica el cáncer de tiroides

Para detectar este tipo de tumor, los especialistas suelen recurrir a:

  • Examen físico del cuello

  • Ecografía de tiroides

  • Análisis de sangre hormonales

  • Biopsia con aguja fina

  • Estudios de imágenes (TAC, resonancia, gammagrafía con yodo radioactivo)

  • Estudios genéticos (en casos hereditarios)

Tipos y grados del cáncer de tiroides

Existen distintos tipos, cada uno con su grado de agresividad:

  • Papilar (el más común)

  • Folicular

  • De células de Hürthle

  • Medular

  • Anaplásico (más agresivo)

El grado del cáncer se evalúa del 1 al 4. Cuanto más bajo, más favorable el pronóstico.

Tratamientos: ¿cuáles son las opciones más efectivas?

El tratamiento depende del tipo de cáncer, su tamaño y si se diseminó. Entre las alternativas más comunes están:

Cirugía

  • Tiroidectomía total o parcial

  • Extracción de ganglios linfáticos cercanos
    Es el tratamiento más habitual. La recuperación puede tardar entre 10 y 14 días.

Terapia con hormona tiroidea

Se utiliza para reemplazar las hormonas que la glándula ya no produce o para evitar el crecimiento de células cancerosas.

Yodo radioactivo

Destruye células tiroideas residuales tras la cirugía. Es muy eficaz para los tipos diferenciados de cáncer.

Radioterapia

Se emplea si el cáncer no responde a otras terapias o reaparece. Ayuda a aliviar síntomas en casos avanzados.

Medicamentos dirigidos

Tratamientos selectivos que atacan mutaciones específicas en las células tumorales. Suelen usarse en casos avanzados.

Inyección de alcohol (ablación)

Para tumores pequeños o si el paciente no puede operarse.

¿Se puede curar el cáncer de tiroides?

En la mayoría de los casos, . Cuando se detecta a tiempo, los tratamientos tienen una alta tasa de éxito. Incluso hay tumores tan pequeños que pueden controlarse sin necesidad de cirugía inmediata.