Mattel, la empresa estadounidense de juguetes, está retirando del mercado más de 10 millones de productos Fisher-Price destinados a bebés y niños de hasta dos años, por contener piezas pequeñas que pueden desprenderse y lastimar o incluso provocar asfixias. Se trata de un incómodo revés para la reputación que tiene la compañía de fabricante de productos seguros. Y a eso se suma que está comenzando la temporada clave de compras navideñas.

Mattel nunca había tenido que sacar de circulación tantos juguetes desde que en 2007 la US Consumer Product Safety Commission (CPSC) le exigió que retirara del mercado millones de unidades por defectos en el diseño y temores por el uso de pintura a base de plomo.

En un intento por contrarrestar el potencial daño a la reputación de la compañía frente a los padres, el gerente general de la unidad de negocios Fisher-Price, Kevin Curran, les dirigió un mensaje por Facebook para “asegurarles que nuestra empresa opera en un entorno altamente regulado, lo que significa que los juguetes son totalmente seguros .

Oppenheim Toy Porfolio, consultora que realiza inspecciones y pruebas en los juguetes nuevos, afirmó que la decisión fue “un modo horrible de comenzar la temporada de ventas navideñas .

También contó que tenía planes de incluir, para la semana siguiente, uno de los juguetes que fue retirado de circulación (la rampa Stand ‘n’ Play Rampway) en su lista “premios de platino de los mejores juguetes para las vacaciones.