En pleno invierno, el negocio de los helados se volvió uno de los más calientes del momento. Arcor, la multinacional de origen cordobés que suele dominar cada categoría en la que ingresa, hará esta semana el lanzamiento oficial en este mercado. Y, para defenderse de esa avanzada, la suiza Nestlé, que con su marca Frigor es la actual líder, realizó ayer su convención de ventas, para ganarle de mano a su futuro competidor. En el medio de esta pelea, Unilever, que supo ser el segundo jugador de la categoría por más de una década, decidió retirarse del negocio y discontinuar la comercialización de su marca Kibón.

Casi todos los años, las empresas de alimentos esperan hasta la primavera para lanzar sus líneas de helados. Sin embargo, esta temporada, la carrera empezó antes de tiempo. El jueves, Arcor dará los detalles sobre cómo será su incursión en las cremas heladas. En tanto ayer, en un encuentro realizado con las 600 personas que conforman su fuerza de venta, más distribuidores y representantes de canales, Matthias Casanova, manager del negocio de Helados de Nestlé, explicó que invertirán 14 millones de pesos para lo que queda del año y el próximo verano.

El desembolso será para heladeras (freezers), material para el punto de venta y comunicación para sus marcas. El año pasado, la compañía había destinado $ 12 millones. La firma estrenará 26 novedades, de las cuales 13 son en la categoría impulsivos (kioscos) y otros 13 están destinados al consumo hogareño, que se consiguen en autoservicios y supermercados.

Los productos que se venden en torno a un peso, caracterizados como impulsivos, representan más del 50% de las ventas de Nestlé. En la empresa sostienen que tienen un 55% de participación de mercado. En los supermercados, donde predominan los productos de mayor valor, la suiza dice poseer un 30% de las ventas. Las novedades incluyen extensiones de las marcas Torpedo, Conogol, Sin Parar, Epa, Svelty y Chomp, entre otras.

Nestlé aspira a tener presencia en más de 30.000 puntos de venta, para que Arcor no le gane en ningún lado. La suiza tiene ingresos por más de $ 90 millones en esta categoría, casi un 10% de los $ 990 millones que facturó en 2004.

La salida de Unilever

En la convención de Frigor ayer llegó a hablarse de la “excelente oportunidad de crecer en el sector . La declaración sonaba rara en medio de la incursión de Arcor. Pero se justifica por la salida de otro jugador grande: Unilever. La multinacional anglo-holandesa abandona el mercado de los helados en el país.

Unilever, que era el segundo jugador en kioscos, con una participación del 25%, con la marca Kibón, ya se había retirado de la batalla en supermercados, donde las que siguen a Frigor son las marcas propias de las cadenas y la firma Ice Cream. Los helados, que se importaban de Brasil y también se tercerizaban en parte, no dejaban la rentabilidad buscada por la compañía, cuya facturación en este negocio apenas superaba los $ 10 millones. Unilever ahora prefiere mirar otros destinos.