

Con marcas como Louis Vuitton, Cartier y Hermès, Francia es líder mundial en exportación de conceptos de lujo al resto del mundo. Sin embargo, en el sector de hoteles de alta categoría, el ritmo internacional lo marcan las cadenas norteamericanas y asiáticas.
Es una anomalía que llamó la atención de Gilles Pélisson, CEO de Accor. Más conocido como un operador de hoteles baratos o de mediana categoría como Ibis, Mercure y Novotel, el grupo francés espera imitar a los fabricantes de joyas y conquistar el extremo más lujoso del mercado. La compañía tratará de que su unidad de negocios Sofitel, que actualmente es considerada “alta categoría , ingrese en la clasificación de “lujoso , donde competiría con cadenas como Intercontinental, Westin, Park Hyatt y St Regis.










