Marko Papic: "Estos dos años, Milei tiene que dedicarse más a la ciencia política"

Bastante silenciosamente, como suelen moverse los dueños de grandes empresas, se realizó esta semana en el MALBA la segunda edición de Repensar Summit, en el que cabezas de diversos grupos escucharon a especialistas en diversos aspecto de los negocios. Uno de los oradores que abrió y les dio un contexto estratégico para el desarrollo de los negocios fue Marko Papic, Chief Strategist BCA Research. Especialista en geopolítica internacional y asesor de bancos centrales, quien conversó con La City acerca de las perspectivas del país, sin escapar a lo inmediato, como lo habían sido las elecciones legislativas bonaerenses de 48 horas antes del diálogo. -No se toma una decisión sobre todo el país basándose en Buenos Aires. En segundo lugar, no sabemos si los votantes rechazaron el plan macroeconómico o si rechazaron la retórica, el clientelismo, las otras cosas. Es por eso que necesitamos más puntos de datos, necesitamos más datos, necesitamos octubre. En este caso, todavía no tenemos la información necesaria para decir si esto es una derrota o no, y que es una elección en Buenos Aires. Buenos Aires tiene similitudes con Nueva York en el sentido de que lo que sucede en Buenos Aires no significa que se transferirá al resto del país, ya que lo que sucede en Nueva York no significa que se transferirá al resto del país. Entonces, lo que no sabemos hoy es si se trata de un rechazo hacia los índices macroeconómicos o hacia la retórica. -¿Los inversores tienen que esperar hasta que tengamos reglas más claras?: -No, solo hasta octubre. No podemos tener una imagen clara hasta que sepamos si Milei tendrá la capacidad de llevar a cabo más reformas. Los primeros dos años fueron como una bandeja, ya sabes, en el baloncesto. Fue "fácil". Milei es macroeconomista, banquero central, Ministro de Finanzas, profesor de Macroeconomía: alta tasa de interés, inflación baja, obviamente. Estos dos años fueron algo dolorosos. Milei es una persona que está muy relacionada con los índices macroeconómicos, bancarios, financieros. Pero los próximos dos años necesita ir más allá de la macroeconomía, porque la Argentina no tiene inflación porque imprime dinero. La Argentina imprime dinero porque tiene un problema político. Entonces, en los próximos dos años será el momento en que Milei tiene que ir más allá de esta política económica y tiene que dedicarse más a la ciencia política. Porque imprimir dinero es algo para compensar otras necesidades que tiene el país. Tiene que negociar con los sindicatos. Necesita cambiar la relación entre el Estado y los intereses especiales. -¿Existen otros líderes con que pueda conversar que tengan representatividad suficiente? -No importó porque había consenso, un consenso macroeconómico, así que la pregunta es, ¿hay en este momento un peronista ambicioso, joven peronista que dice, ah, le robaré a Milei la receta macroeconómica, pero agregaré algunas especias o tal vez quitaré las especias, más picante medio, no demasiado picante. Casos como Bill Clinton o Tony Blair, en el que un consenso se generó en los índices macroeconómicos y aquí podrían representar que hay un político de un político peronista que puede llegar al gobierno y que puede robar esos conceptos de Milei los conceptos de la receta de los índices macroeconómicos. Tal vez agregar algunas cosas quitar otras hacerlo como en un punto medio. No importa la política, lo que importa es si hay un peronista que me pueda decir esto me quedo con esto de Milei. -¿Habría políticos dispuestos a sostenerlo? -Los políticos son profesionales en una cosa, no de basket, ni de fútbol, sino de ser elegidos, en ganar elecciones, italianos, socialistas, lo que sea y, sin embargo, boom cambio de paradigma, pero podría estar equivocado y nuevamente es por eso que necesitamos ver octubre. -Los empresarios pareciera que solo tienen ojos para el proyecto de Milei. -Los inversores y los empresarios solo ven el cuerpo a cuerpo como su modelo. potencialmente, pero no está claro quién es una alternativa. ¿Quién sería el líder por ahora? Los inversores son brutales, no hay lealtad, no hay ideología, lo que los inversores quieren ver es la inflación y el superávit primario que bajan, reformas pro negocios, reformas estructurales del mercado laboral, ya sabes. Puede ser Milei, Messi o el Conejo de Pascuas. -¿Después de octubre se desencadena un proceso de inversiones? -Hay mucho optimismo en el mundo hacia la Argentina. Hay una gran reserva de buena voluntad. La gente, y les digo, hablo con muchos inversores, muchos, billones de dólares de inversión bajo gestión. Ningún país del mundo tiene tanto, provoca tanta esperanza como la Argentina. Entonces, no necesitas hacer tanto. La Argentina solo tiene que juntar cuatro años. No se trata de materias primas, no se trata de cobre, no se trata de litio. El mundo puede obtener su litio, cobre y gas en otra parte. Es por el capital humano de la Argentina. Me reúno en fondos de cobertura, en fondos soberanos, en bancos, ya sabes, como si este fuera un país con una educación increíble y, por lo tanto, el cambio, la tasa de cambio en Argentina puede ser más dramática. Quedan muy pocos países en el planeta a los que puedan ir, son la Argentina; Irán, que cambió de gobierno, y tiene 90 millones de personas educadas, es una locura. Ucrania, la guerra termina, ya sabes, Argentina, Ucrania, Irán, estos son países grandes con mucha educación que de repente pueden crecer 100 veces. Bueno, todo este optimismo no es por tener a Messi, ni por el precio de las materias primas; ni por el litio, el cobre o el gas, se debe al capital humano que tiene Argentina y al alto nivel de educación que forman parte de países que pueden ser grandes potencias. Argentina, Irán, Ucrania. -¿Tres países en guerra?! -Y sí, eso es lo malo, precisamente, que todos estos años de política aquí en la Argentina han impedido que crezca tanto como pudiera. -¿Cómo impacta el contexto global, internacional? -Yo siempre planteo la realidad de un mundo multipolar, con el cual los países tienen que tener conversaciones individuales. Y aquí me preocupo, porque América latina más que por cualquier otro lugar del mundo, la historia es muy ideológica en lo que respecta a la geopolítica. -Pero lo cierto es que los EE.UU. han fijado una posición muy dura sobre la relación de la Argentina con China. -Chile también y China. Bien, aquí está el problema. Estados Unidos no quiere que envíes soja y cobre a China, eventualmente, algún día cobre. Pero va a imponer aranceles al cobre y la soja importados. Entonces, lo que Estados Unidos quiere evitar es que se envíe a China, por ejemplo, soja y cobre. Entonces, ¿a dónde se supone que debemos enviarlo? Entonces, lo que estoy diciendo es que no tienes que hacer amigos o tomar partido por ninguno de los dos países. Lo que sueles hacer es enfatizar demasiado la relación.

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Ariel Cohen

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