La corporación Bank of America detectó en la primera semana de julio "la entrada más grande vista en aproximadamente dos meses", con una cantidad neta de inversión de U$S 7800 millones hacia los fondos de bonos.

"Es una vista bienvenida. Durante todo el año, cientos de miles de millones de dólares han salido de todos los bonos, en términos netos", informó la revista de finanzas Barron's, sobre el balance de período.

Después de que Wall Street finalizara su peor primera mitad del año desde 1970, ahora se observa una reversión de la tendencia, lo que podría arrojar "grandes implicaciones para los mercados financieros".

"Ahora, la mejora del sentimiento en el mercado de bonos subraya un cambio potencial en la forma en que las personas y las instituciones de todo el mundo están invirtiendo", continuó la firma.

La respuesta se debe en parte a que los bancos centrales de todo el mundo están eliminando liquidez de los mercados de bonos y tipos de interés. "La demanda reducida reduce los precios de los bonos y eleva sus rendimientos", repasó Barron's.

Sólo en Europa, el rendimiento de los instrumentos soberanos italianos a diez años superó el 4%, lo que representa el máximo en los últimos ocho años. Mientras tanto, el comportamiento de los alemanes escaló 2,5 puntos porcentuales.

"El rendimiento del Tesoro a 10 años ha subido a alrededor del 3 %, muy por encima de las expectativas de inflación anual promedio para los próximos 10 años del 2,37 %, lo que significa que los inversores ahora pueden obtener un ‘rendimiento real' del bono", agregó la publicación.

Con este escenario, el ente de finanzas destacó que los inversionistas finalmente "están siendo compensados por poseer bonos seguros del gobierno".

"La cartera estándar 60/40, en la que los asignadores de activos ponen el 60% del dinero de los inversionistas en acciones y el 40% en bonos, está regresando. Los bonos vuelven a ofrecer una verdadera cobertura contra el riesgo de las acciones", subrayó.