El dato de inflación de enero de 6% no incidió ayer en los mercados: los bonos que ajustan por el CER prácticamente no tuvieron variaciones: los diferentes analistas de la plaza venían pronosticando que el número del INDEC iba a estar entre 5,7% y 6,3 por ciento. Los rendimientos de los diferentes instrumentos en pesos que ajustan por el alza de los precios minoristas estuvieron descendiendo en las últimas semanas alineándose con las expectativas de una mayor inflación esperada. Un indicador de la preferencia por CER lo dio la licitación de deuda efectuada por el Tesoro ayer en la que obtuvo unos $ 401 millones de los cuales el 53% estuvo compuesto por instrumentos indexados por CER, el 38% por papeles a tasa fija, y el 9% restante a tasa variable. El corto plazo manda: el 91% correspondió a bonos con vencimiento en 2023 mientras que, el 9% restante vencen recién en el 2027. El muro que representan las elecciones para los inversores en deuda pública en pesos queda de manifiesto por la diferencia de rendimientos entre el TX24 y el T2X3, papeles que ajustan por el CER y que vencen después y antes de las elecciones presidenciales, respectivamente. El diferencial se ubicaba en 20 puntos a los valores de ayer, por debajo de los máximos alcanzados la semana pasada pero muy superiores a los observados en el último trimestre del año pasado. El máximo de esta suerte de "riesgo elección" alcanzó a casi 37 puntos en junio pasado, en plena ebullición financiera provocada por la huida de Martín Guzmán del Ministerio de Economía y su reemplazo por la efímera Silvina Batakis. La expectativa de una alta inflación en todo el 2023 quedó validada hasta por el viceministro de Economía Gabriel Rubinstein, quien confesó que recién para fin de año podrían observarse variaciones mensuales de inflación cercanas al 3 por ciento. El propio ministro de Economía Sergio Massa esperaba llegar a esa medición para abril. Para las próximas semanas es de esperar que se acentúe la concentración de vencimientos de deuda en los dos meses previos a las elecciones presidenciales. Lo que suceda en las PASO será tan determinante como las declaraciones de quien surja como principal candidato a suceder a Alberto Fernández desde el 10 de diciembre. Seguramente, como en 2019, las PASO de agosto mostrarán con un alto grado de probabilidad, quién será el próximo presidente de los argentinos. La transición desde las PASO hasta el 10 de diciembre y las negociaciones eventuales entre los equipos económicos salientes y entrantes definirán la suerte de la deuda en pesos con vencimiento antes de octubre. Por lo pronto, lo único cierto es la alta inflación mes a mes en la Argentina, que puede acrecentarse en función del voltaje de la campaña y de la capacidad de refinanciar la deuda.