
Renault anunció un nuevo plan estratégico a largo plazo con el que busca vender más de 3 millones de unidades, generar un flujo de efectivo libre de 2.000 millones de euros (u$s 2.720 millones) y obtener un margen operativo de 5% para el año 2013.
Sin embargo, las acciones de la automotriz cayeron 3%, a 47,25 euros, en París, porque ese plan a seis años terminó con las esperanzas de los inversores de que haya cambios en la alianza con la japonesa Nissan. Además la compañía dio a conocer un pronóstico pesimista para las ventas europeas de este año.
El plan de la firma francesa se extiende hasta fines de 2016 y fija metas concretas sobre nuevos productos, recorte de costos, gasto en Investigación y Desarrollo, y potenciales avances en la participación de mercado en países emergentes.
Carlos Ghosn, CEO de la compañía, dijo que el nuevo programa pone los cimientos para una Renault que tenga raíces en Francia pero se sienta cómoda en todo el mundo.
Con respecto a las esperanzas de algunos de que la alianza con Nissan se convierta en una fusión, el CEO dijo que ambas compañías valoran su identidad y él no ve ninguna ventaja en confundir esas identidades con una fusión.
Renault informó que la empresa y su aliada, Nissan, venderán entre ambas 1,5 millones de autos impulsados a batería para el año 2013. A partir de 2015, producirían las dos un total de 500.000 vehículos eléctricos anuales.
Se espera que Nissan anuncie un plan estratégico similar cuando informe los resultados para todo el año, a fines del actual trimestre.
Renault dio a conocer el suyo, bajo el lema Renault 2016 - Drive the Change, al informar su esperada vuelta a la rentabilidad. La firma informó ganancias netas de 3.500 millones de euros en 2010.











