En esta noticia

El Banco de España eleva el crecimiento previsto para la economía española en 2025 y 2026. La nueva proyección refuerza un escenario de expansión sostenida. El organismo sitúa el avance del PIB en el 2,9% en 2025 y en el 2,2% en 2026. El consumo privado aparece como el principal motor.

Según la entidad, “el Banco de España ha elevado tres décimas el crecimiento previsto para 2025, al 2,9%, y ha subido cuatro décimas el de 2026, al 2,2%”. La revisión responde a un contexto de menor incertidumbre comercial. También influye una valoración más favorable del sector exterior.

El BdE eleva estas previsiones en línea con las del Gobierno. Las nuevas cifras consolidan un panorama macroeconómico más estable. El crecimiento seguirá apoyado en la demanda interna durante todo el horizonte de proyección.

El Banco de España ha recordado a los españoles priorizar el pago de la hipoteca por sobre otras deudas. (Imagen: archivo)

El Banco de España eleva el crecimiento por la fortaleza del consumo

El Banco de España eleva el crecimiento previsto para 2025 por el empuje del consumo privado. La mejora también se explica por la revisión de datos oficiales. En concreto, “la revisión de la contabilidad nacional llevada a cabo en septiembre por el Instituto Nacional de Estadística (INE)” ha tenido un impacto directo.

Para 2026, la entidad anticipa un mayor dinamismo de la renta disponible. “Ha influido el mayor dinamismo esperado tanto de las rentas laborales como del crédito al consumo que favorecerán el gasto de los hogares”, señala el informe. A ello se suma el mejor comportamiento del sector exterior.

En todo el periodo analizado, el BdE eleva el papel de la demanda interna. Consumo e inversión serán los pilares del crecimiento. La demanda externa mantendrá una contribución negativa.

Demanda interna, inversión y exportaciones en el nuevo escenario

Del crecimiento del 2,9% previsto para 2025, la demanda interna tendrá un peso decisivo. Según el BdE, “3,5 puntos porcentuales serán aportados por la demanda interna, mientras que la externa restará 0,6 puntos”. El patrón se repite en 2026.

Ese año, “la demanda interna contribuirá con 2,7 puntos y la externa detraerá 0,5 puntos”. El organismo destaca el avance de las exportaciones de servicios no turísticos. Este segmento compensará parte del menor dinamismo global.

A corto plazo, el crecimiento seguirá siendo sólido. Para el último trimestre del año, el Banco de España adelanta “un ritmo de crecimiento robusto, con una tasa estimada de entre el 0,6% y el 0,7%” y un repunte exportador.

Inflación, empleo y cuentas públicas según el Banco de España

El BdE eleva también las previsiones de inflación. La entidad “ha revisado dos y cuatro décimas al alza las previsiones de inflación media para 2025 y 2026, hasta el 2,7% y el 2,1%”. El componente energético explica buena parte del ajuste.

La inflación subyacente sigue una trayectoria similar. “Las de inflación subyacente se han revisado en la misma medida, dos y cuatro décimas, hasta el 2,6% en 2025 y hasta el 2,4% en 2026”. Los servicios mantendrán presiones al inicio del próximo año.

En empleo, la creación de puestos se moderará. El crecimiento pasará del 2,7% en 2025 al 1,4% en 2027. El déficit público se mantendrá en el 2,5 % del PIB en 2025 y la deuda bajará al 98,3% en 2027, según el Banco de España.

El Banco de España ha lanzado una advertencia para evitar fraudes en pagos de alquiler. (Fuente: Shutterstock)