En esta noticia
Madrid vive horas de tensión después de que una fuerte explosión sacudiera este sábado el bar Mis Tesoros, en la calle Manuel Maroto, en el distrito de Puente de Vallecas.
El estallido, registrado alrededor de las tres de la tarde, dejó un saldo de 21 heridos, de los cuales tres permanecen en estado grave y dos con pronóstico potencialmente grave, según confirmaron fuentes de Emergencias Madrid.
El siniestro afectó también al edificio de viviendas situado sobre el local, que sufrió la destrucción parcial de su piso superior. Los restos se desplomaron sobre el bar, provocando escenas de caos y una inmediata movilización de equipos de rescate.
Hasta el lugar acudieron 17 dotaciones de bomberos, 13 equipos de Samur-Protección Civil y unidades del SUMMA 112, junto a agentes de la Policía Nacional y Municipal.
¿Qué se sabe hasta ahora sobre las causas del estallido?
Las primeras investigaciones apuntan a que la explosión podría haberse originado por una fuga de gas en el interior del bar. La onda expansiva provocó daños severos en la estructura, aunque los bomberos han señalado que la estabilidad del inmueble no corre peligro inminente.
Equipos caninos especializados y drones de la Policía Municipal trabajan en la zona para descartar la presencia de víctimas atrapadas entre los escombros.
El desplome del piso superior y la magnitud de la destrucción han obligado a prolongar las tareas de desescombro durante la tarde.
Las autoridades mantienen un perímetro de seguridad en torno al lugar, mientras se continúa con la investigación técnica que determinará las causas exactas del siniestro.
¿Cómo se desarrolla el operativo de emergencias en Vallecas?
La rápida intervención de los servicios de rescate permitió atender a los heridos en el lugar y trasladar a los más graves a hospitales cercanos de la capital.
Varios de los afectados son clientes y trabajadores del establecimiento, sorprendidos por la violencia de la explosión.
Los bomberos permanecen en la zona realizando labores de control y apuntalamiento, además de retirar cascotes y evaluar el estado del edificio. La Policía Municipal, por su parte, mantiene la circulación cortada en la calle Manuel Maroto y alrededores para garantizar la seguridad y permitir el trabajo de los equipos.
Vecinos del barrio, aún conmocionados, relataron haber sentido un estruendo seguido de una nube de polvo que cubrió la zona. Muchos permanecen alejados de sus viviendas hasta que finalicen las inspecciones.
