YPF es el accionista mayoritario de Metrogas, la distribuidora de gas de la mitad de la ciudad de Buenos Aires y el conurbano. La intención de la petrolera es desprenderse de la compañía, pero aún está preparando el proceso para realizar su salida. La concesión de Metrogas vence en 2027. En el pliego de privatización -de los '90- estaba la opción de extender ese plazo por 10 años. Pero luego vinieron numerosos incumplimientos de los Gobiernos a la hora de aplicar ajustes de tarifas. Para tratar de "saldarlos", la actual administración introdujo un artículo en la ley Bases: el plazo de concesión se puede extender por 20 años, es decir hasta 2047. La compañía ya hizo su presentación ante el regulador Enargas, para que decida si le corresponde esa posibilidad. Ese organismo cuenta con un largo plazo para hacer una recomendación. Una compañía con un mayor plazo de concesión resulta más atractiva para un potencial comprador. Mientras tanto, las distribuidoras de luz y gas están aplicando los aumentos autorizados por el Gobierno. La secretaría de Energía -a través de la Revisión Tarifaria Quinquenal- autorizó incrementos luego que las empresas presentaron sus planes de inversión. Metrogas destinará $ 210.000 millones en su servicio durante los próximos cinco años. A cambio, se le autorizó un aumento del 15% en su servicio (el de llevar gas a los hogares, industrias y comercios) que se llama "valor agregado de distribución" (VAD). Ese renglón -el VAD- representa cerca de un 30% de una boleta de gas. El grueso de la misma se la lleva el consumo de gas en sí mismo. La recomposición del 15% le permitió a las distribuidoras (Metrogas y Naturgy) un incremento del 3% en las boletas desde mayo. El 12% restante se cobrará en 30 cuotas. Las tarifas se ajustarán mensualmente con una fórmula que combina 50% del Índice de Precios al Consumidor (IPC, la inflación minorista) y otro 50% por el Indice de Inflación mayorista (IPIM). Esa combinación está dando alrededor de 2% a 2,5% mensual, dependiendo de la evolución del costo de vida y los precios mayoristas. Ambos también están muy atados al dólar. La mayoría de los clientes de Metrogas está dentro de la categoría N1. Es decir, que no reciben subsidios para pagar sus facturas. Sin embargo, el Gobierno decidió que las distribuidoras paguen más por el gas en el invierno -algo habitual-, pero que no lo trasladen a los consumidores. De esa forma, habrá una subvención temporal por ese aumento de costos que no se verá reflejado en las boletas. La factura de gas promedio de casi el 60% de los clientes de Metrogas está en torno a los $ 8500 mensuales. Son los denominados R1, que consumen menos de 500 metros cúbicos por año. Al siguiente grupo más grande en composición, R2-R3, las boletas le llegan por valores de entre $ 20.000 y $ 35.000 en los meses de invierno. En verano, esos números caen. Además de YPF, Integra, el FGS de Anses y tenedores de la Bolsa son accionistas de Metrogas.