El panorama político argentino muestra un escenario en reconfiguración, con un oficialismo que conserva el liderazgo electoral, pero enfrenta un creciente desgaste social y económico, y una oposición que empieza a consolidar alternativas frente a las elecciones legislativas de medio término.
A nivel nacional, La Libertad Avanza se mantiene al frente con una intención de voto del 36,4%, seguida muy de cerca por Fuerza Patria, que suma un 34%. En tercer lugar aparece Provincias Unidas, el espacio que promueven varios gobernadores -entre ellos Martín Llaryora y Maximiliano Pullaro-, con 6,5%, mientras que el Frente de Izquierda alcanza 4,3%.
El 18,8% restante se distribuye entre voto en blanco, indecisos y otras fuerzas menores, lo que revela un nivel de volatilidad electoral alto y un electorado aún en proceso de redefinición.
La evaluación del Gobierno Nacional refleja el impacto del ajuste económico y la conflictividad social: 59,8% califica negativamente la gestión de Javier Milei, frente a un 40,2% que mantiene una visión positiva. Los indicadores de humor social acompañan esa tendencia: sólo la mitad de los consultados (49,9%) dice tener "muchas ganas" de ir a votar, mientras que un 33,3% lo hará "con pocas ganas" y un 16,8% directamente no cree que participe.
Las principales preocupaciones en el plano cotidiano confirman el deterioro del poder adquisitivo: los bajos salarios (57,5%), la inseguridad (47,7%), la inflación (38,8%) y el desempleo (31,2%) lideran el ranking de problemas. A nivel estructural, la corrupción política (54%), la inestabilidad económica (51%) y la pobreza (47,8%) son los temas que más inquietan al electorado, seguidos por la percepción de un mal funcionamiento de la Justicia.
En el terreno de las motivaciones de voto, un 24,7% asegura que votará para apoyar al gobierno de Milei, mientras que un 18,9% lo hará para apoyar al kirchnerismo o peronismo. En sentido opuesto, un 16,6% pretende castigar al gobierno libertario, y un 14,1% dice que su voto estará enfocado en respaldar a su gobernador, una señal del peso territorial que están ganando los mandatarios provinciales en la nueva etapa política.
En la provincia de Buenos Aires, la tendencia general se invierte. En el distrito más poblado del país, Fuerza Patria tiene un 42,3% de intención de voto, mientras que La Libertad Avanza tiene un 31,5%. Frente de Izquierda se queda con un 4,1% y Provincias Unidas con 3,7%, en tanto un 11,6% elige otro espacio y un 6,8% votaría en blanco o impugnaría su voto.
La gestión nacional en Buenos Aires recibe una evaluación negativa del 60,8%, mientras que el gobernador Axel Kicillof tiene un 53,1% de valoración negativa contra un 46,9% de aprobación, una cifra algo superior a la media nacional, aunque insuficiente para revertir el descontento. En este territorio, las preocupaciones giran principalmente en torno a los bajos ingresos (60,5%), la inseguridad (54,2%) y la inflación (37,1%), que concentran el eje del malestar social.
En conclusión, la encuesta de Proyección Consultores confirma que Milei aún retiene el primer lugar en intención de voto a nivel nacional, pero su base electoral comienza a erosionarse ante la inflación persistente, el malestar social y la pérdida de expectativas.
La oposición peronista reagrupada en Fuerza Patria consolida su segundo lugar, mientras que a los gobernadores les cuesta reforzar su perfil propio. En la provincia de Buenos Aires, el oficialismo provincial conserva la delantera
Ficha técnica
Universo: Habitantes de la República Argentina Instrumento: Cuestionario estructurado
Técnica de recolección: Presencial
Reclutamiento: On-Line mediante puntos muestra geolocalizados
Muestra: Ajustada según parámetros poblacionales de sexo, edad, nivel educativo, región, y voto anterior
Período: 8 a 14 de octubre del 2025
Casos efectivos: 3.875
Margen de error: 1,57%
Nivel de confianza: 95%