En medio de la pulseada con el Gobierno por posibles nuevas listas con aumentos tras el salto del dólar oficial a $ 1380 el jueves pasado que se definirían esta semana, las empresas alimenticias ponen el foco sobre la presión impositiva.
Si bien la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (COPAL) sostuvo que no observaron aumentos generalizados en los precios y que cada empresa definirá los ajustes necesarios en función de la diversidad de su portafolio y estructura de costos.
Lo que llevó a poner el ojo sobre lo que sucede con el Impuesto sobre los Ingresos Brutos (IIBB). "En un año, un ejercicio realizado con 28 empresas consolidó $ 32.000 millones en créditos acumulados por IIBB que no pueden usar ni recuperar. Esto impacta en las posibilidades de inversión y encarece todo", escribieron en X.
Una cifra que si se extrapola a las 14.500 empresas que agrupa COPAL arrojaría que el costo oculto del sistema es gigantesco. Aunque el foco del reclamo está dirigido a las provincias ya que son estas quienes cobran el impuesto.
"En Argentina, las empresas pagan Ingresos Brutos por todo lo que facturan, incluso si no generan ganancias. Y peor aún: deben adelantar pagos a provincias donde ni siquiera cuentan con establecimientos", puntualizaron en Copal.
Lo que lleva a que se generen saltos a favor, créditos fiscales que quedan atrapados en el sistema y que las empresas no pueden usar ni recuperar fácilmente. Aunque la situación varía según cada provincia: del total 40% son corresponden Misiones, 20% en Buenos Aires y 9% en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA).
Cómo reclamar los "saldos a favor"
Como adelanto El Cronista, la Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA) implementará un nuevo régimen de saldos a favor para evitar la acumulación por parte de las pequeñas y medianas empresas (pymes) a partir de la evolución de dos variables: las compras y las ventas.
"El objetivo es evitar que las pymes acumulen saldos a favor cuando cae su nivel de actividad. Vamos a establecer niveles de riesgo y ajustar automáticamente las alícuotas para que, cuando caen las ventas, no se siga reteniendo de más", explicó el director de ARBA, CristianGirard.
Pese a ello, según comentaron fuentes internas del fisco provincial, aún no hay fecha para la reunión con el Gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, en donde se determinaría la letra chica de la medida que va a afectar la caja de ingresos.
A pesar de ello, en La Plata, destacan que desde el inicio de la gestión de Girard -asumió en el primer año de mandato de Kicillof- se redujo la cifra de saldos a favor que acumula ARBA: pasando de tres veces la recaudación del impuesto a 0,75 veces.
En CABA a principios de este año se habilitó la devolución de saldos exprés del IIBB. Y según reportan en la Agencia Gubernamental de Ingresos Públicos (AGIP) ya utilizaron 12.300 contribuyentes de la a quienes se le devolvió en total $ 9000 millones (monto promedio $ 730 mil) en apenas 48 horas hábiles desde su solicitud.
Trámite exprés
Para iniciar el trámite se debe ingresar con Clave Ciudad al sitio web de AGIP (www.agip.gob.ar) y allí dirigirse a la solapa de "Cuenta Corriente Tributaria". Para seleccionar la opción de "Operaciones" y luego "Devoluciones SAF" donde se deberá completar un formulario y los datos de la Clava Bancaria Uniforme (CBU).
"Al confirmar que toda la información es correcta, podrán descargar el comprobante y, de no existir inconsistencias, recibirán el dinero en su cuenta en un máximo de 96 horas hábiles", destacaron en el Gobierno de la Ciudad.
Aunque con la letra chica de que los reintegros para saldos a favor son hasta $ 10 millones. Quienes tengan una cifra superior o necesiten atención personalizada, continuarán realizando el trámite a través del trámite a distancia (TAD).
Demoras en la devolución
Pero para la Copal los tiempos de devolución son en promedio de 2 años y en algunos casos más de 8 años. "Es grave porque se adelantan impuestos sin contraprestación, es un préstamo a tasa 0 a las provincias, forzoso y sin fecha de devolución y que muchas veces ese crédito nunca se cobra", detallaron.
Es por ello que sostienen que se debe apuntar eliminar los regímenes de pago a cuenta. Aunque ello implicaría un importante baja de la recaudación para los gobernadores en un año electoral, por lo que proponen que en la transición hacia ello se permita utilizarlos para pagar otros impuestos.
"Los "saldos a favor" no son un favor. Forman parte del costo argentino, que afecta a empresas, trabajadores y consumidores. Es hora de reformar este sistema", concluyeron en la Coordinadora. Si lo que se quiere es alentar las inversiones, reducir las dificultades para crecer, bajar los precios y tener un impacto positivo en el empleo.