El presidente Alberto Fernándezdialogó este jueves con su par brasileño, Luiz Inácio Lula Da Silva, a través de una videoconferencia en la que abordaron la situación comercial bilateral en el marco de los acuerdos firmados en la reunión que mantuvieron el pasado 23 de enero en Buenos Aires.
El diálogo ocurrió luego de que el gobierno argentino confirmara el uso de yuanes para el comercio bilateral con China, y que el presidente brasileño impulsara una medida similar para el comercio con el gigante asiático.
Además, Fernández y Lula dialogaron sobre el rol de la Unasur (Unión de Naciones Suramericanas), organismo regional al que ambos países anunciaron formalmente su retorno en las últimas semanas, y a la vez destacaron la importancia de profundizar "los vínculos de fraternidad y el comercio" regional.
Lula, preocupado por Argentina
Según una fuente de la Presidencia de Brasil consultada por Télam, Lula le hizo preguntas a Fernández sobre la situación política interna en la Argentina, en virtud de la situación económica actual y el horizonte de las elecciones generales marcadas para octubre.
"Lula preguntó y hablaron un poco de la situación política en la Argentina", aseguró la fuente del vecino país a Télam.
El intercambio entre los mandatarios se da en un contexto en el que Lula defiende la adopción de monedas locales en el comercio bilateral y el estudio de una moneda para comercio exterior sudamericana con el objetivo de reducir la dependencia del dólar.
"Estoy a favor, en el caso de Brasil con Sudamérica, de que creemos una moneda para comerciar, que aquí en los Brics (la coalición de Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) se cree una moneda de comercio entre nuestros países, como los europeos crearon el euro", dijo el miércoles Lula en su paso por España y Portugal.
En el plano bilateral, ya durante su visita a Buenos Aires en enero, Lula había lanzado la idea de una moneda común (no única, solo para comercio exterior) que sustituya al dólar, cuyo nombre fue bautizado en los papers del ministro de Economía, Fernando Haddad, como "Sur".
El líder histórico del PT tuvo, en las últimas semanas, otros gestos que han sido agradecidos públicamente por la Casa Rosada, entre ellos la crítica contra el desempeño de los organismos multilaterales de crédito, referencia explícita del caso de Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Lo hizo desde Shangai, durante la asunción de la expresidenta Dilma Rousseff como titular del banco de los Brics, el New Development Bank (NDB), cuando acusó al FMI de "asfixiar" a Argentina con las exigencias para el cumplimiento del acuerdo.
Lula aseguró que el NDB (Nuevo Banco de Desarrollo, en español) deberá funcionar como una alternativa al Banco Mundial.