En medio de una creciente expectativa, ayer se conoció un nuevo borrador del acuerdo universal contra el cambio climático primero en su especie que podría dar como resultado la 21ª sesión de la Conferencia de las Partes (COP21) que se está desarrollando en París. Antesala de lo que será el acuerdo final, que, en palabras de su presidente, el ministro francés de Relaciones Exteriores Laurent Fabius, se publicará mañana a las 14 (hora argentina), este documento presenta menos páginas y corchetes que los previos. "Tenemos los ingredientes para un resultado ambicioso, pero aún no se han tomado las decisiones más difíciles. Ahora los ministros [que encabezan las negociaciones] tienen solo dos días para encaminarnos ya sea hacia un futuro que exceda los 1,5´C de temperatura o a un mundo con 3´C", reflexionó Tasneem Essop, jefa de la delegación de World Wildlife Fund (WWF) en París.


En una línea similar, Oscar Soria, portavoz de la organización global Avaaz, apuntó: "Este borrador eliminó algunas de las principales barreras para llegar a un acuerdo y, ahora, el mundo entero está esperando saber si París verdaderamente se despedirá de los combustibles fósiles para 2050".
En temas como diferenciación de responsabilidades, financiamiento y nivel de ambición en la reducción de emisiones, sin embargo, los desacuerdos entre los 195 países que aquí se reúnen persisten.
Es por ello, enfatizó Soria, que hay un número de preguntas claves a las que los ministros todavía deben responder. Entre ellas, cómo se formulará el objetivo global a largo plazo (de mantenerse en el texto), si se acordará algún mecanismo de revisión de las ambiciones previo a 2020 (año en que el acuerdo entraría en vigencia) y cuáles serán los mecanismos de financiación tras 2020.