Colombia es un país repleto de tesoros escondidos que cada vez ganan más atención por parte de los viajeros nacionales e internacionales. Con una variedad de paisajes, climas y culturas, el país ofrece experiencias únicas para todos los gustos, y el turismo local sigue sorprendiendo con destinos que combinan historia, naturaleza y arquitectura.
Uno de esos lugares es Jericó, un encantador municipio ubicado en el suroeste del departamento de Antioquia.
Este pueblo, de calles empedradas y arquitectura colonial bien conservada, ha sido catalogado por muchos turistas como uno de los destinos con el mejor clima del país.
Jericó, el destino con el mejor clima y una atmósfera única
Ubicado a más de 1.900 metros sobre el nivel del mar, Jericó ofrece un clima templado que oscila entre los 16 y los 22 grados centígrados durante todo el año. Esta característica climática lo ha posicionado como uno de los pueblos más agradables para visitar, ya que permite disfrutar de actividades al aire libre sin el agobio del calor extremo o el frío excesivo.
Turismo en Jericó: patrimonio, cultura y paisajes coloniales que enamoran
El casco urbano de Jericó conserva una arquitectura colonial que ha sido preservada ya que sus casas coloridas, balcones de madera tallada y calles empedradas evocan un pasado lleno de historia. Entre los principales atractivos se encuentran la Catedral, el Museo de Arte Religioso y la casa natal de Santa Laura Montoya, la primera santa colombiana.
Asimismo, el municipio hace parte de la Red de Pueblos Patrimonio de Colombia, lo que lo destaca aún más como un destino cultural y turístico por excelencia. Cada rincón de Jericó invita a explorar su legado histórico, a degustar su café artesanal y a caminar por senderos ecológicos que conectan con una naturaleza imponente y serena.