

La economía colombiana cerró el 2024 con un crecimiento moderado del Producto Interno Bruto (PIB) de 1,7%. Este resultado, aunque por debajo de las expectativas iniciales, marca una importante recuperación respecto al débil 0,7% del año anterior, que reflejó la desaceleración económica que afectó a muchos sectores.
En medio de un contexto global incierto, Colombia comenzó a mostrar señales de estabilidad y reactivación, gracias a la solidez de ciertos sectores productivos, como la agricultura. En particular, la producción y exportación de café se destacaron como un motor clave para el crecimiento económico del país.
Crecimiento económico: un comienzo de año Lento y un repunte final
De acuerdo con Piedad Urdinola Contreras, directora del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), el crecimiento del PIB colombiano en 2024 fue impulsado principalmente por el sector agrícola, que experimentó un notable aumento del 8,1%. Este repunte aportó 0,8 puntos porcentuales al crecimiento global del país.
Si bien el primer semestre del año fue moderado, con crecimientos del 0,6% en el primer trimestre y un repunte del 1,9% en el segundo, fue en el cuarto trimestre cuando la economía colombiana mostró su mayor expansión, alcanzando un 2,3%.

Este crecimiento refleja una reactivación moderada, pero sostenida, que fortalece las perspectivas para 2025.
El Café, pilar de la agricultura colombiana y motor de crecimiento
Dentro de la agricultura, uno de los sectores más destacados fue la producción de café. El país experimentó un impresionante aumento del 22,5% en los cultivos de café, un resultado favorecido por los precios internacionalmente altos, lo que permitió a Colombia aprovechar su posición como uno de los mayores exportadores de este grano en el mundo.
Este auge en la producción cafetera no solo contribuyó al crecimiento del PIB, sino que también representó una fuente crucial de ingresos para miles de familias rurales, impulsando el empleo y la estabilidad en las zonas cafetaleras.
La exportación de café se consolidó como una de las principales fuentes de divisas para Colombia, contribuyendo significativamente al balance comercial del país. En 2024, la tendencia alcista en la producción cafetera fue un factor clave para la economía colombiana, no solo por su impacto en las cifras del PIB, sino también por el efecto multiplicador que genera en otros sectores, como el transporte, la comercialización y los servicios relacionados con la industria cafetera.
Sectores en alza y en retroceso en la economía colombiana
A pesar de los resultados positivos en la agricultura, otros sectores de la economía colombiana no mostraron el mismo dinamismo. Por ejemplo, la minería sufrió un retroceso considerable, con una caída del 5,2% en la extracción de carbón y minerales metalíferos.
La disminución en la producción de carbón (-13,3%) y de minerales metalíferos (-8,3%) afectó negativamente el rendimiento de la industria minera. Del mismo modo, el sector petrolero experimentó una caída del 0,7% en la extracción de crudo y gas, lo que impactó de manera negativa en las proyecciones de crecimiento económico.

Por otro lado, sectores como el comercio y los servicios experimentaron un crecimiento robusto, con un notable incremento en actividades terciarias, como el comercio, los servicios financieros, telecomunicaciones y transporte, que fueron los principales impulsores de la economía durante los últimos meses de 2024.
Crecimiento económico: ¿qué esperar en 2025?
A pesar de los desafíos que persisten, las proyecciones para la economía colombiana en 2025 siguen siendo moderadamente optimistas. Se espera que la inflación se ubique alrededor del 3,6%, en una tendencia hacia la meta del Banco de la República, aunque las proyecciones de crecimiento para 2025 se mantienen cautas.
La expansión de sectores clave, como la agricultura, continuará siendo determinante para el comportamiento económico del país, con el café como uno de los principales motores de exportación.
Aunque el crecimiento económico de Colombia en 2024 fue modesto, los resultados sugieren que el país ha comenzado a recuperar terreno después de la desaceleración de 2023. La producción de café, con su destacado desempeño en la agricultura, jugó un papel crucial en este proceso de recuperación.
En los próximos años, la estabilidad de sectores clave, como el agrícola, podría ser fundamental para mantener el impulso económico y generar las bases para un crecimiento más sólido y sostenido.










