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Aunque China es uno de los países firmantes del Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares desde 1992, recientes informes indican que ha desarrollado una nueva arma capaz de causar destrucción masiva sin utilizar energía nuclear.

Se trata de una bomba de hidrógeno no nuclear que, según especialistas, podría cambiar por completo el equilibrio militar a nivel mundial.

Este desarrollo, considerado por algunos medios como una bomba "ecológica", no produce la contaminación radioactiva tradicional de una bomba atómica, pero posee una capacidad destructiva igual de alarmante.

¿Qué es la bomba "ecológica" desarrollada por China y por qué genera alarma?

Según el medio The Eurasian Times, científicos chinos han logrado diseñar una bomba de hidrógeno no nuclear que pesa solo 2 kilogramos y que, al ser detonada, genera una bola de fuego de más de 1.000 grados Celsius. Esta temperatura, capaz de derretir estructuras y paralizar infraestructuras enteras, se mantiene por unos dos segundos, tiempo suficiente para dejar inutilizable cualquier objetivo alcanzado.

Una simulación térmica muestra cómo funciona una bomba de hidrógeno no nuclear similar a la desarrollada por China, capaz de generar más de 1.000°C en cuestión de segundos. (Fuente: Grok IA)

En este sentido, este tipo de bomba se presenta como una alternativa a las armas nucleares tradicionales ya que a pesar de no generar residuos radiactivos, puede causar destrucción masiva en zonas estratégicas como plantas eléctricas, autopistas o bases militares, sin los efectos secundarios contaminantes que suelen preocupar a la comunidad internacional.

¿Cómo funciona esta nueva arma y qué efectos tendría en un conflicto armado?

Los informes aseguran que esta bomba "ecológica" tiene la capacidad de neutralizar avances enemigos mediante el calor extremo que genera. Su uso estaría diseñado para impedir el paso de tropas, destruir equipamiento militar y cortar líneas de comunicación en cuestión de segundos.

Además, su funcionamiento silencioso y preciso le da una ventaja táctica frente a otras armas de alto impacto. Su despliegue en zonas clave podría dar lugar a paralizaciones masivas sin provocar explosiones visibles ni radiación residual, dificultando incluso su detección y atribución inmediata.

Aunque no deja residuos radiactivos, esta bomba puede destruir infraestructura crítica como carreteras y centrales eléctricas sin necesidad de energía nuclear. (Fuente: Grok IA)

Tercera Guerra Mundial: ¿puede esta bomba ser una señal de una nueva era de armamento mundial?

El desarrollo de esta bomba por parte de China se produce en un contexto global cargado de tensiones. Aunque el país asiático mantiene su postura oficial en contra de la proliferación de armas nucleares, este nuevo tipo de armamento podría marcar el inicio de una carrera armamentística más silenciosa, pero igual de peligrosa.

Según analistas como el historiador británico Niall Ferguson, no es exagerado hablar de una posible Tercera Guerra Mundial. De hecho, el especialista asegura que el panorama político actual se asemeja cada vez más al que precedió a la Primera Guerra Mundial.

¿Por qué la bomba H de China no es nuclear?

La denominación "bomba de hidrógeno no nuclear" proviene del uso de hidruro de magnesio, un compuesto químico que contiene hidrógeno y reacciona violentamente al contacto con el aire, generando temperaturas de hasta 1.000 grados Celsius en segundos.

A diferencia de las bombas de hidrógeno tradicionales, que funcionan mediante procesos de fusión nuclear, esta nueva tecnología no involucra reacciones nucleares ni produce radiactividad, por lo que su impacto no deja residuos contaminantes. Algunos medios especializados, como The Eurasian Times y el South China Morning Post, señalan que su poder destructivo es comparable al de una bomba termobárica, pero sin los riesgos de la energía atómica.