El Gobierno de Colombia sigue avanzando con firmeza hacia una Transición Energética Justa, un proceso clave en el marco del Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026. Este enfoque busca promover el uso de energías más limpias y sostenibles, y uno de los recursos más prometedores en este camino es el hidrógeno blanco.
Con el objetivo de regular su exploración y explotación, el Ministerio de Minas y Energía de Colombia ha presentado un proyecto de resolución que establece los mecanismos de asignación de áreas, requisitos y condiciones para su evaluación, exploración y explotación, involucrando a las comunidades y a los sectores interesados en el proceso.
El desarrollo del hidrógeno blanco representa una gran oportunidad para Colombia de consolidarse como un líder en energías renovables en América Latina y el mundo. Este recurso tiene el potencial de impulsar la descarbonización del país, mejorar la seguridad energética y reducir su dependencia de fuentes no renovables.
¿Qué es el hidrógeno blanco?
El hidrógeno blanco es un tipo de hidrógeno natural que se forma a través de procesos geológicos en la corteza terrestre. A diferencia del hidrógeno producido de manera industrial, el hidrógeno blanco se encuentra de forma natural en ambientes geológicos, como gases volcánicos, sistemas hidrotermales (como géiseres) y capas de la corteza continental y oceánica. Esta fuente se considera una Fuente No Convencional de Energía Renovable (FNCER), es decir, una alternativa limpia, económica y sostenible para la generación de energía.
El hidrógeno blanco tiene una huella de carbono casi nula o negativa, lo que lo convierte en una opción clave para reducir las emisiones de gases contaminantes y mitigar el cambio climático. Además, se presenta como una fuente ilimitada de energía, lo que lo hace aún más atractivo como recurso estratégico para el futuro energético de Colombia.
El Potencial del hidrógeno blanco en Colombia
Colombia tiene un gran potencial geológico para la producción de hidrógeno blanco, gracias a su riqueza en recursos renovables y una infraestructura hidroeléctrica consolidada. Estos factores colocan al país en una posición privilegiada para convertirse en un líder en la producción de hidrógeno, no solo a nivel nacional, sino también en el mercado internacional.
El Cuarto Congreso Internacional de Hidrógeno recientemente organizado en Colombia, reunió a expertos nacionales e internacionales del sector energético, donde se discutieron las oportunidades y desafíos que enfrenta el país para aprovechar al máximo el potencial de esta fuente de energía. Entre los temas más destacados estuvieron la cooperación entre la industria, la academia y el sector público, la creación de mecanismos de financiamiento para el hidrógeno y sus derivados, y la infraestructura necesaria para su transporte y almacenamiento.
Juan Camilo Zapata, líder del Grupo Hidrógeno del Ministerio de Minas y Energía, expresó durante el congreso el compromiso del gobierno con una Transición Energética Justa y sostenible, destacando la importancia de fortalecer la normativa que facilite la producción y explotación de hidrógeno blanco en Colombia.
Según Zapata, se está trabajando activamente en la identificación de los actores clave de la cadena de valor del hidrógeno y en la regulación necesaria para integrar este energético en sectores estratégicos como la energía, el transporte y la industria.
Proyecto de resolución para regular la exploración de hidrógeno blanco
Como parte de los esfuerzos para regular la explotación de hidrógeno blanco, el Ministerio de Minas y Energía ha puesto en consulta pública un proyecto de Resolución que define los mecanismos de asignación de áreas para la evaluación, exploración y explotación del hidrógeno blanco en el país. Esta iniciativa está dirigida a los actores del sector energético, las comunidades y la ciudadanía en general, para que puedan participar activamente en el proceso.
El proyecto establece los requisitos y condiciones necesarios para la implementación de proyectos de hidrógeno blanco, garantizando que los proyectos sean sostenibles, responsables y beneficiosos tanto para las empresas como para las comunidades locales.
Además, se da especial atención a la participación de las comunidades que se encuentren en las áreas de influencia de estos proyectos, brindándoles la oportunidad de beneficiarse directamente de los recursos energéticos, ya sea para uso industrial o para proyectos productivos regionales.
Desde el 2 hasta el 17 de abril de 2025, el documento estará disponible para consulta pública y recepción de comentarios, como parte del proceso de participación ciudadana previsto por la Ley 1437 de 2011.