En la búsqueda de una piel radiante y libre de imperfecciones, la alimentación es un factor clave para combatir el acné. Por medio de hábitos alimenticios se puede controlar estos brotes en la piel.
Desde la adolescencia, etapa marcada por cambios hormonales tumultuosos, hasta la edad adulta, ciertos alimentos pueden desempeñar un papel fundamental en la prevención y el manejo del acné.
La importancia de la alimentación en el control del acné
Según la farmacéutica Paula Martín Clares, el acné es una de las patologías más comunes en la población. A lo largo de los años se ha investigado su origen, incluyendo factores como la hiperqueratinización, la disbiosis de C. Acnes y la hiperseborrea.
Sin embargo, Clares también señala que la alimentación, la exposición solar, algunos medicamentos y los cambios hormonales juegan un papel importante en la aparición del acné.
Según el portal Welife, el acné generalmente comienza durante la adolescencia, una etapa marcada por cambios hormonales significativos. En este período, establecer hábitos saludables es muy importante.
La experta recomienda a los adolescentes y sus familias que se enfoquen en minimizar el impacto del acné en su calidad de vida, recordando que es una condición común en su edad y que, con el tiempo, tiende a mejorar la piel.
Cómo mejorar el acné a través de la alimentación
La nutricionista Paula Martín Clares destaca la importancia de la alimentación en la prevención y el control del acné. Según ella, la dieta puede ayudar a prevenir brotes. Por eso sugiere algunos puntos a tener en cuenta.
- Ingesta de antioxidantes: los radicales libres y la oxidación pueden contribuir a la inflamación presente en cada etapa del desarrollo del acné. Los antioxidantes ayudan a combatir estos efectos negativos.
- Incluí ácidos grasos saludables: el omega 3 es un potente antiinflamatorio que no debe faltar en la dieta para el acné.
- Garantizá vitaminas esenciales: las vitaminas A y E son fundamentales para una piel saludable, así como los minerales como el zinc y el selenio.
- Consumí prebióticos y probióticos: estos ayudan a mantener un equilibrio saludable en la flora intestinal, lo que puede influir positivamente en la piel.
Por otra parte, Clares advierte sobre los alimentos que se deben evitar para mejorar el acné:
- Eliminar alimentos proinflamatorios: azúcares refinados, alimentos procesados y grasas saturadas pueden aumentar la inflamación en el cuerpo y empeorar los brotes de acné.
- Evitar alimentos con alto índice glucémico: estos alimentos pueden provocar picos de azúcar en la sangre, lo que a su vez puede promover la inflamación y aumentar la producción de andrógenos, empeorando el acné.
