El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, confirmó que el Ejército saldrá a patrullar las calles de Washington en compañía de la Policía Nacional para reducir la criminalidad.
El pasado 11 de agosto Trump declaró una "Emergencia de Seguridad Pública", tomó el control de la Policía de Washington y anunció la activación de unos 800 soldados de la Guardia Nacional de la capital, para "restablecer el orden público", pese a que los datos de criminalidad de la ciudad se encuentran en su menor nivel en 30 años.
"Creo que voy a salir esta noche con la Policía y el Ejército, por supuesto. Vamos a hacer el trabajo", afirmó Trump en una entrevista radiofónica con el periodista Todd Starnes.
Trump ordena al Ejército que salga a las calles
Inicialmente, Trump había anunciado que patrullaría las calles de la capital junto a las fuerzas de seguridad, pero se limitó a presidir un acto de agradecimiento para los agentes con los que compartió pizza.
El 11 de agosto, el presidente tomó el control de la seguridad de Washington, por 30 días inicialmente, amparándose en la ley que permite intervenir la autoridad de la ciudad.
Además, se mostró dispuesto a ampliar el periodo de control federal sobre la ciudad por medio de una petición que será presentada ante el Congreso y dijo que "no habrá tolerancia para la barbarie, la suciedad y la escoria; quiero que Washington sea un lugar limpio y seguro".
Desde la toma federal de la policía, seis estados gobernados por republicanos (Virginia Occidental, Carolina del Sur, Ohio, Misisipi, Luisiana y Tennessee) han enviado más efectivos, por lo que el número de soldados de la Guardia Nacional desplegados en Washington superaría ahora mismo los 2000.
El Gobierno enfrenta fuertes críticas por la militarización de las calles
La medida ha sido duramente criticada por la mayoría de los ciudadanos de la capital estadounidense, según muestran los sondeos, y el vicepresidente, JD Vance, y el secretario de Defensa, Pete Hegseth, ya fueron abucheados ayer al visitar a tropas de la Guardia Nacional desplegadas en la estación central de tren de Washington.
Grupos ciudadanos también han subrayado que la militarización de las calles de la ciudad ha deparado accidentes como el que ocurrió el jueves cerca de la Explanada Nacional, cuando un Humvee de la Guardia Nacional impactó a un vehículo civil, obligando a los bomberos a activar un operativo para sacar de su interior al conductor, que sufrió heridas leves.
En paralelo, la fiscal general, Pam Bondi, festejó el operativo. "Hemos realizado un total de 630 arrestos y decomisado 86 armas ilegales en Washington", escribió en X y añadió que "ayer se realizaron 53 arrestos, además de 24 arrestos de ICE (siglas del servicio de Control de Inmigración y Aduanas) y 10 armas incautadas".
El propio Trump aprovechó la entrevista de hoy con Starnes para cargar contra la política migratoria del anterior Gobierno y alabar el giro estricto por el que ha apostado.
"En los últimos cuatro meses, no ha entrado nadie a nuestro país porque somos duros, somos inteligentes y sabemos lo que hacemos", dijo el presidente que aseguró que "el daño que Joe Biden y su grupo de idiotas le hicieron a este país es inimaginable, especialmente en la frontera".
Con información de EFE