La Administración de Seguro Social (SSA) se encuentra bajo una creciente presión financiera y se prevé que el déficit aumente en un futuro cercano.
Ante estas preocupaciones de que la estructura se vuelva insostenible y que millones de jubilados que dependen de sus beneficios se vean sustancialmente afectados, se presentó una propuesta para elevar la edad mínima de jubilación de 62 a 70 años.
A qué edad los jubilados comienzan a recibir beneficios completos
En la actualidad, los estadounidenses tienen la opción de solicitar beneficios de la Seguridad Social a partir de los 62 años. Sin embargo, quienes opten por cobrar los beneficios antes de la edad de jubilación completa se enfrentarán a una reducción notable en el dinero que recibirán.
Los beneficios completos están disponibles entre los 66 y 67 años, según el año de nacimiento. Esta nueva propuesta impulsa que recién a partir de los 70 años se comiencen a recibir los beneficios completos. Por ende, jubilarse antes de los 70 significaría una gran pérdida en los cheques mensuales de Seguridad Social.
Que individuos se verían mayormente afectados por este cambio
Si bien esta política fiscal conservadora procura un alivio al presupuesto del sistema, no todos los individuos se verían igualmente afectados por este cambio.
Aquellos que elijan o se vean obligados a jubilarse antes debido a problemas de salud u otras circunstancias se someterían a grandes recortes en sus beneficios mensuales.
A su vez, las personas con ingresos más bajos, que suelen tener una esperanza de vida más corta, pueden no vivir lo suficiente como para beneficiarse plenamente de sus cheques de Seguridad Social si se ven obligados a seguir trabajando hasta los 70 años.
Que ocupaciones saldrían en desventaja con este cambio
La naturaleza de ciertas ocupaciones plantea preocupaciones adicionales. A las personas que trabajan en empleos físicamente exigentes como la construcción, la industria o la atención de la salud, les resultaría complicado retrasar su jubilación hasta los 70 años.
Ante las distintas habilidades laborales a poner en práctica y las disparidades socioeconómicas, las condiciones de las personas se tornan muy desiguales a la hora de decidir a qué edad jubilarse y hasta cuando sostener una vida laboral decente.