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El acceso al privilegio económico que alguna vez definió al sueño americanode comprar una casa se desvanece en Estados Unidos. Según datos de CNBC, la mayoría de personas en el país ya no logra cubrir ni los gastos mínimos que permiten una vida estable.

Ya en 2023, cerca del 60% de los hogarescon menores ingresos no alcanzó el umbral de calidad mínima de vida, según el índice desarrollado por el Ludwig Institute for Shared Economic Prosperity. Lo que para muchos solía ser parte del camino hacia el sueño americano, hoy se traduce en recortes, deudas o renuncias a metas de largo plazo.

¿Por qué la mayoría de personas en Estados Unidos está perdiendo el privilegio económico de comprar una casa?

El problema central es que los costos crecieron más rápido que los salarios en Estados Unidos. Mientras el ingreso se mantiene estancado, los gastos se disparan.

Según el informe citado por CNBC, entre 2001 y 2023:

  • Las primas médicas subieron un 301%

  • Los costos de viaje aumentaron un 170%

  • El alquiler trepó un 131%

  • Criar hijos, incluyendo ahorrar para la universidad, se encareció un 107%

El resultado es que la capacidad real de gasto bajó un 4%. Para muchas familias, esto implicadejar de lado cosas básicas como ahorrar, invertir o incluso tomar vacaciones. La mayoría de personas enEstados Unidos ya no puede cubrir ni una vida modesta sin hacer sacrificios.

Comprar una casa es imposible en Estados Unidos: se perdió el símbolo del sueño americano

Una de las señales más evidentes del declive del privilegio económico es que comprar una casa se volvió un lujo.

Laura Lynch, planificadora financiera y fundadora de The Tiny House Adviser, explica que no se trata de dejar de comprar un café por las mañanas, sino de un sistema que ha elevado los estándares a niveles inalcanzables.

Frente a este panorama, los expertos recomiendan enfocarse en lo esencial:

  • Reducir los grandes gastos: vivienda, transporte y alimentación

  • Buscar alternativas como viviendas compartidas o más pequeñas

  • Priorizar ingresos adicionales: cambio de empleo, nuevas habilidades o trabajos paralelos

Para muchos, este ajuste es una necesidad. El sueño americano, como se conocía en Estados Unidos, está en pausa. La prioridad para muchos, migrantes o no, es resistir sin perder la esperanza de recuperarlo.