El Golf está de vuelta y totalmente renovado. Volkswagen, bajo el sol de Cafayate, Salta, dio a conocer oficialmente el hatchback con el que peleará en el caliente segmento de los medianos, contra rivales de peso, como el Ford Focus (made in Pacheco) y el Peugeot 308 (oriundo de El Palomar).

El Golf de séptima generación tendrá tres niveles de equipamiento: Trendline, Comfortline y Highline (ver recuadro). La primera cuenta con un motor de 1,6 litros de 110 caballos y caja manual de cinco velocidades. Su valor es de $ 229.993.

Un escalón más arriba se ubica la alternativa Comfortline, que incorpora un motor 1.4 TSI BlueMotion de 140 caballos y caja manual de seis velocidades, además de una alternativa automática DSG de siete marchas. Sus precios serán de $ 253.702 y $ 263.708, respectivamente.

El tope de gama corre por cuenta de la versión Highline, también con motor 1.4 TSI BlueMotion de 140 caballos y caja automática DSG de siete relaciones, pero suma elementos de confort. El precio asciende a los $ 276.165.

En cuanto al diseño exterior, el Golf está renovado. Las ruedas delanteras se desplazaron 43 milímetros hacia adelante, que alargó visualmente el capot. En comparación con el modelo anterior, su longitud se aumentó en 56 milímetros y su distancia entre ejes, 59 milímetros. En tanto, la parte trasera sigue siendo uno de los símbolos distintivos del modelo, con modificaciones en los faros y en la tapa del baúl.

En cuanto a su delantera, se destaca la nueva parrilla, los faros de xenón con luz de marcha diurna de LED y luz de conducción en curva, faros antiniebla integrados y sensores de estacionamiento delanteros y traseros. Además, suma lavafaros, llantas de aleación de 17", faros traseros envolventes con nuevo diseño, doble caño de escape (le da un mayor aire deportivo) y spoiler trasero con tercera luz de stop, entre otras características.

Acento azteca

El modelo, producido en México, ya se encuentra en el país, pero a cuenta gotas. Volkswagen trajo 500 unidades que se vendieron en estos primeros meses del año. El plan de la automotriz es importar 5000 unidades a lo largo de 2015. En los concesionarios ya toman reservas de unidades para ser entregadas en julio (sin congelar precio, por supuesto). Desde la empresa aseguran que la versión Trendline será la más demandada, por lo que el 65% de las unidades que importarán corresponderán a esa variante. La Comfortline, mientras tanto, representará un 30% y la Highline, el 5%. Sin embargo, la diferencia económica entre la gama media y alta -unos $ 13.000- hace pensar a los ejecutivos de la alemana que los compradores apelarán a la alternativa más equipada.

El regreso

La séptima generación del modelo es uno de los retornos más esperados. Porque la quinta nunca conoció la Argentina (hubo un restyling regional de la cuarta) y la sexta, lanzada en 2013, arribó sólo en versión GTi (deportiva). Esta ausencia temporal había dejado el camino más llano para la competencia (Ford Focus y Peugeot 308). Sin embargo, en la empresa alemana no creen que hayan perdido terreno. "Para nosotros es reentrar en el segmento. Siendo un ícono de la marca, no nos será difícil volver; de hecho, ya hicimos un pre lanzamiento en enero, con algunas unidades vendidas, y la demanda superó la oferta", aseguró Jorge Portugal, vicepresidente de Ventas y Marketing, ante la consulta de RPM.

En otro sentido, el impuesto a los autos de alta gama, enemigo número uno de las automotrices, fue mirado de reojo por Volkswagen, y el nuevo Golf no cayó en sus garras. "Ninguna de las tres versiones está alcanzada por el impuesto", dijo Portugal. ¿Cómo lo hicieron? "Cada vez que hay un lanzamiento, vemos el precio al que la planta productora nos puede vender, hacemos los cálculos para ver si está alcanzado por el gravamen y, al no entrar en la banda, lanzarlo al mercado es más factible", contó el ejecutivo, que pasará a ocupar la misma posición que ahora ostenta pero en Volkswagen Brasil.

En junio, mientras tanto, la empresa traerá el Golf GTI. La versión deportiva sí será alcanzada por el "impuesto a los autos de lujo". Lo mismo sucederá con el Golf Variant, la versión familiar del modelo, que llegará al país en el mismo período y, probablemente, caiga bajo el gravamen.