Un factor que es transversal a todas las provincias y a la industria es el contexto macroeconómico por el que atraviesa el país y que afecta a la actividad hidrocarburífera.

"El incremento en los costos genera un perjuicio en las inversiones y, obviamente, ese factor es el que más pesa. Sería importante que se pueda trabajar en ese sentido para tener estabilidad en nuestra macroeconomía", sostuvo Martín Cerdá, ministro de Hidrocarburos de Chubut.

El 30% de lo producido en el Golfo San Jorge se exporta, mientras que el resto está destinado al mercado interno, que está atravesado por la oferta y la demanda. "Esto genera una caída en la venta de barriles de hidrocarburos en referencia al precio internacional", declaró Cerdá.

Por su parte, Matías Kalmus, presidente del Instituto de Energía de Santa Cruz, aseguró que cada provincia, como dueña de sus recursos "tiene el trabajo fundamental de articular entre el Gobierno Nacional con las operadoras, gremios, contratistas y demás, para asegurar y generar las condiciones necesarias para que se invierta en el sector, con reglas claras".

Alejandro Monteiro, ministro de Energía y Recursos Naturales de Neuquén, precisó que las regiones deben buscar la forma de desarrollar sus recursos de manera sustentable, a partir del trabajo que se genera y de los ingresos que reciben a causa de las regalías. "Con el desarrollo de Vaca Muerta hay 47 concesiones otorgadas con plazo de 35 años, y cada una tiene cláusulas de estabilidad fiscal, para darle seguridad a las empresas que invierten", especificó.

Por su parte, Ricardo Molina, consultor e integrante del equipo de Energía de Patricia Bullrich, planteó la necesidad de incentivar el impulso a las exportaciones interviniendo en las empresas estatales.

"Las principales empresas son privadas. La idea de privatizar el sector energético surge en torno a las compañías que pertenecen al Estado e interfieren en el mercado: YPF, Enarsa y Camessa, para incentivar el impulso a las exportaciones", manifestó por último Molina.