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Mientras otras pizzerías cierran o hacen malabares para sobrevivir, Tomasso acelera su expansión en la Argentina y otros países de América latina.
La cadena de pizzas y empanadas artesanales low-costacaba de llegar a Uruguay. El primer local de la marca en el país vecino, que abrió el sábado, está ubicado en el barrio de Pocitos, en Montevideo.
Esta apertura forma parte de un plan de expansión que la empresa puso en marchacon la reciente inauguración de una sucursal en Asunción, Paraguay, la primera en ese país también.
El crecimiento regional contempla la apertura de un total de 20 locales en el plazo de un año. Prevé sumar 10 locales en Uruguay y otros 10 en Paraguay antes de fin de 2022. "Son los dos primeros mercados a los que ingresamos por fuera del territorio argentino", dice Máximiliano D'Alessandro, socio de Tomasso Argentina.
La intención es probar el modelo de negocio en esos dos países y asegurarse de que puede replicarse en otros. "Estamos analizando más mercados latinoamericanos, como Chile y el sur de Brasil. La idea es continuar ampliando la lista", adelanta el ejecutivo, que encabeza el plan de expansión.
Sobre la decisión de desembarcar en el exterior, D'Alessandro sostiene que la compañía tiene "un know-how en términos de producción y operación que la hace competitiva". "La pizza se llama igual en todo el mundo y es uno de los platos más consumidos. Además, crece la ingesta de empanadas", señala.
En la Argentina, la marca sumará su local n° 51 en septiembre. Estará ubicado en Avenida de Los Incas, en Villa Urquiza. Desde la irrupción del coronavirus, abrió 12 sucursales, entre franquicias y locales propios. En el último mes, inauguró tres, en los barrios porteños de Caballito y Palermo, y en la localidad de Monte Grande, en el partido bonaerense de Esteban Echeverría.
De los 50 locales que hoy funcionan, 43 están en la Ciudad de Buenos Aires. Los otros siete se encuentran en la provincia (el de Monte Grande y otro en Pergamino), Rosario (Santa Fe), Neuquén y Bariloche (Río Negro).
"Todavía no apretamos el acelerador en la provincia de Buenos Aires y otros puntos del interior. Estamos evaluando entre cinco y ocho plazas para llevar la propuesta", anticipa el socio.
La clave del éxito
¿Cuál es la fórmula de Tomasso para crecer en pandemia, en un momento crítico para el sector? Una serie de factores explican su rápida expansión. Por un lado, la marca entendió que podía sacar ventaja con locales pequeños.
Se trata de puntos de venta al paso que funcionan sin salones, exclusivamente para take-away y delivery, mediante envíos propios y entregas con las plataformas Rappi y PedidosYa.
"Son superficies de entre 60 y 80 metros cuadrados, que requieren una inversión en torno a u$s 30.000 y u$s 35.000 por local. El recupero del capital se alcanza a los 18 meses. Tienen una barra para comensales, pero no un despliegue de mesas", detalla D'Alessandro.
La empresa aplica una rigurosa gestión, otro condimento que hace que su receta sea exitosa. "Los locales siempre vendieron mucho en términos de volumen. Para que el negocio sea rentable, armamos una estructura de operación y administración acorde. Nos ocupamos de capacitar a los recursos humanos", apunta.
A la menor estructura de costos y el management especializado, se suma su propuesta de precios convenientes.Mientras que pizzas de la competencia salen entre $ 800 y $ 1000, Tomasso las comercializa entre $ 400 y $ 500. Su menú también incluye siete empanadas clásicas (a $ 49 cada una) y "Tentación", una línea con seis sabores que escapa de los tradicionales, a $ 60 la unidad.
Además, para el público celíaco, incorporó productos gluten free,como la pizza de muzzarella sin TACC y empanadas de carne y de jamón y queso, que se venden congeladas para terminar de cocinar en casa.
Otra modalidad de venta que la pizzería adoptó, que ayudó a potenciar sus operaciones, fue una tienda virtual, donde se realiza el pedido en línea, se programa el horario y se retira por el local más cercano.
Productos para celíacos, venta a través de tienda virtual y llegada a countries de la zona norte, algunas de las claves del crecimiento de Tomasso.
Además, Tomasso llega a los countries y barrios cerrados del corredor norte de la provincia de Buenos Aires gracias a una red de revendedores que montó, que acercan los pedidos a los clientes sin que estos tengan que moverse de sus casas. En su sitio web, figura una lista de revendedores para que los usuarios puedan contactarse con ellos por WhatsApp, según la zona.
"Tenemos una buena recepción de la oferta por su relación precio-calidad. No nos da miedo salir a competir en zonas dominadas por otros jugadores. Confiamos en nuestra propuesta", concluye D'Alessandro.
Tomasso inició sus actividades como una fábrica de empanadas y pizzas enfocada en el canal business-to-business (B2B). Su primer local abrió en la calle Salguero, en el barrio de Palermo. En 2016, lanzó la venta directa al consumidor y empezó a abrir más sucursales.
La cadena enfrenta el desafío de posicionarse en un sector que atraviesa uno de los peores momentos.El 20% de las pizzerías porteñas cerró con el Covid-19, según la Asociación de Propietarios de Pizzerías y Casas de Empanadas de la República Argentina (Appyce).
Sin embargo, Tomasso apuesta por reactivar la industria, como también lo haceSbarro, la marca estadounidense de pizzas estilo neoyorkino que este jueves abre en la Avenida Corrientes el primer local en la Argentina.