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La batalla contra el sarro en grifos y las manchas amarillas en inodoros es una de las tareas más tediosas del hogar. A pesar de recurrir a remedios caseros tradicionales como el vinagre o el bicarbonato de sodio, los resultados a menudo dejan mucho que desear, dejando las superficies opacas y con un aspecto descuidado.

Sin embargo, un nuevo truco de limpieza completamente natural y económico se ha vuelto viral en redes sociales, prometiendo resultados inmediatos y sorprendentes.

Este método está ganando popularidad rápidamente por su eficacia sin la necesidad de productos químicos agresivos ni horas de esfuerzo. Con solo dos ingredientes que casi todos tienen en casa, es posible despedirse de esas molestas manchas y devolverle el brillo a los grifos y el blanco al inodoro.

El truco de la abuela para limpiar el sarro en canillas e inodoro

Para llevar a cabo este sencillo truco, solo se necesita el jugo de dos limones medianos y dos cucharadas soperas de sal gruesa. La combinación de estos dos elementos crea una potente mezcla de limpieza. Simplemente exprimir los limones y mezclar el jugo con la sal hasta obtener una pasta consistente.

Una vez que la pasta esté lista, aplicarla directamente sobre las áreas afectadas. Dejarla actuar entre 10 y 15 minutos. Después, frotar suavemente con un cepillo o una esponja y enjuagar con agua limpia. Esta técnica no solo remueve el sarro y la cal, sino que también elimina el tono amarillento del inodoro de forma segura.

¿Por qué es mejor que los métodos tradicionales?

A diferencia del vinagre, que deja un olor fuerte, o de los productos industriales, que pueden ser costosos y agresivos, la mezcla de limón y sal ofrece una solución más sostenible y agradable. El jugo de limón aporta una fragancia fresca y natural, mientras que la sal gruesa actúa como un abrasivo suave que potencia la limpieza sin dañar el esmalte ni el acero inoxidable de tus grifos.

Este truco no solo es una alternativa económica, sino también una opción que te permite mantener tu baño impecable sin comprometer la calidad de tus superficies o exponerse a químicos dañinos.