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Los expertos coinciden en que la mejor posición para dormir es de costado. Esta posición promueve la alineación adecuada de la columna vertebral y permite que la gravedad actúe de manera natural en la cabeza y el cuello.
Otras posturas recomendadas para el sueño incluyen acostarse boca arriba o en posición fetal. No obstante, hay una posición que se debe evitar si buscas perder peso.
Dormir boca abajo puede generar presión en la columna vertebral, ocasionando molestias en cuello, espalda y hombros. Además, esta puede contribuir al aumento de peso en adultos.
La postura para dormir que te hace aumentar de peso
Según las estimaciones, el 16% de la población mundial elige dormir boca abajo, una posición que se considera perjudicial para la salud por diversas razones.
Dormir boca abajo ejerce presión sobre la columna vertebral, el cuello, el estómago y la mandíbula, lo que puede dar lugar a diversos problemas, como:
Dolor de espalda y cuello
Al dormir boca abajo, la columna vertebral asume la carga del peso de la cabeza y el cuello, lo que puede dar lugar a tensiones y molestias.
Problemas digestivos
La presión aplicada en el estómago puede interferir con el proceso digestivo y reducir el ritmo metabólico. Una digestión más lenta puede resultar en una mayor absorción de calorías y nutrientes, lo que puede contribuir al incremento de peso.
Problemas dentales
La presión en la mandíbula puede generar molestias en los dientes, además de contribuir a un desgaste dental.
¿Por qué es importante esperar antes de acostarse después de cenar?
Acostarse inmediatamente después de cenar puede generar trastornos digestivos, como el reflujo gastroesofágico, y elevar el riesgo de ganar peso.
Esto se debe a que el estómago todavía contiene alimentos sin digerir, lo que puede dar lugar a diversos problemas, como:
- Reflujo gastroesofágico. Se produce cuando el ácido del estómago sube por el esófago y llega a la garganta. Esto puede causar acidez, ardor de estómago y náuseas.
- Acumulación de grasa. Dormir boca abajo puede retardar el proceso digestivo, resultando en una absorción incrementada de calorías y nutrientes.