Después de que el Congreso brasileño bloqueara el proyecto de ley contra noticias falsas, el presidente Luiz Inácio Lula da Silvapidió apoyo a China para diseñar una nueva regulación sobre redes sociales. El objetivo: permitir el bloqueo de plataformas sin necesidad de orden judicial.
El propio Lula confirmó que un delegado chino llegará pronto a Brasil para compartir "experiencias sobre regulación digital".
China como ejemplo: ¿una señal preocupante?
El tema encendió el debate en Brasil. Lula discutió el tema directamente con Xi Jinping en mayo, y su esposa, Rosangela "Janja", expresó preocupación por el rol de TikTok en la política brasileña. Xi respondió que Brasil tiene todo el derecho de prohibir plataformas si lo considera necesario.
La Corte Suprema, lista para intervenir
Mientras tanto, el Supremo Tribunal Federal analiza si debe declarar responsables a las plataformas por los contenidos publicados por los usuarios, incluso sin intervención judicial.
Esto podría debilitar la libertad de expresión, según juristas y medios críticos con el gobierno.
¿Qué dicen las Big Tech y los expertos?
Google advirtió que eliminar el artículo 19 del Marco Civil de Internet pondría en riesgo la seguridad jurídica.
Académicos reclaman que la regulación venga del Congreso, no del Ejecutivo o del Poder Judicial.
Red financiada por el gobierno, conectada con Cuba
Otro punto polémico: la red "anti fake news" Rede Minerva, financiada por el gobierno brasileño, envió a un investigador a un foro en Cuba sobre propaganda. Aunque se justificó como un viaje académico, la oposición denuncia vínculos ideológicos preocupantes.
Condenas por expresarse: ¿nuevo rumbo autoritario?
Dos casos recientes también avivaron el debate:
Una periodista fue condenada a pagar más de $100 mil dólares por un artículo crítico.
El comediante Léo Lins recibió una sentencia de 8 años de prisión por chistes considerados ofensivos, lo que fue calificado como "típico de dictaduras" por medios como Folha de São Paulo y The Washington Post.
¿Brasil camina hacia una mayor regulación digital o hacia la censura? La discusión apenas comienza, pero la polémica ya está instalada.