El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Estados Unidos ha lanzado una iniciativa que podría reconfigurar las reglas para la permanencia de extranjeros en el territorio, lo que tendría un impacto directo en miles de mexicanos.
La propuesta, que aún está en fase de análisis, busca reducir el tiempo máximo de estadía en Estados Unidos para quienes viajan con visas de estudiante, de intercambio cultural o como periodistas. La noticia ha generado inquietud en la comunidad, que ve en estos posibles cambios una limitación a su movilidad y planes a largo plazo.
De cuánto sería el nuevo límite de estadía legal en USA
Según el DHS, el objetivo principal de esta medida es reforzar la seguridad nacional y mejorar la supervisión del sistema migratorio para prevenir posibles abusos. La propuesta no busca prohibir la entrada, sino establecer límites de tiempo más concretos. Aunque la medida está en fase de consulta, de ser aprobada, se implementarían restricciones significativas a las estancias prolongadas que actualmente permiten estas visas.
Este será el nuevo límite de estadía para estudiantes con visa F o Visa J
La propuesta del DHS plantea una reducción considerable en el tiempo de permanencia. Actualmente, los portadores de la visa F (estudiantes) pueden permanecer en el país durante toda la duración de su programa académico, lo que a menudo se extiende por varios años. Con la nueva norma, esta visa se limitaría a un máximo de cuatro años. La misma restricción aplicaría a la visa J (visitantes de intercambio).
Esta será el nuevo límite de estadía para periodistas con visa I
Uno de los cambios más notorios afectaría a la visa I (periodistas internacionales), que en lugar de la vigencia de hasta cinco años, vería su límite inicial reducido a 240 días, con opción a prórroga.
¿Qué pasa con la visa de turista B1/B2?
Es crucial aclarar que la propuesta del DHS no afecta a la visa B1/B2, la más común entre los mexicanos que viajan por turismo o negocios. Para estos viajeros, la duración de la estancia seguirá siendo determinada por el oficial de inmigración en el punto de entrada, con un máximo de seis meses por visita. La iniciativa se enfoca únicamente en las visas que permiten estancias prolongadas, con el fin de tener un mayor control sobre los movimientos migratorios a largo plazo.